Argenis viene con la ropa de pelear...

Argenis regresará, y cuando lo haga no hay dudas de que en el caso OMSA se producirán variaciones sobre el mismo tema. No es lo mismo el asesinato de Yuniol que las compras que la auditoría pone en evidencia, aun cuando lo primero sea consecuencia de lo segundo.

En un país en que se hace difícil caminar y masticar chicle al mismo tiempo, habrá que ver cómo la autoridad manejará los expedientes.

La Procuraduría sabe que Argenis no viene a entregarse, sino a presentar batalla, y que su cometido será una distracción. Incluso falta saber si tratará de salvarse él o se afanará en salvar a otros, pues todo entra en el cálculo, y mucho más si la estrategia fuera de conjunto. Las preguntas se sobran y con las respuestas habrá que ver. Por ejemplo. ¿Pueden llevarse los juicios al mismo tiempo, o cada uno por su lado, y en ese caso, cuál iría primero?

El derecho dice, la ley señala y la doctrina apunta, y no debería haber problema de jurisdicción, ni de tipo de delito. Aunque viendo las ocurrencias y los descuidos, no bastará con encomendarse a Dios. Los demonios andan sueltos, y las revelaciones verdaderas se harán en los tribunales.