Leonel tiene que ser menos misterioso

Si el coro que ahora montan los partidos cantores contra las primarias abiertas de Danilo se hubiera producido antes, tal vez las cosas no habrían llegado a los actuales extremos.

La situación no es de vuelta y vuelta como la carne que no se quiere quemar en el asador. El problema es que no hay suficiente carbón, escasa la carne y hambre que espera hartura. Cada cual pretende un pedazo.

Así, difícil avanzar, pero mucho más echar hacia atrás. Danilo sugirió ponerla en nevera para que se enfriara y Leonel aceptó.

La idea de seguro era dormir a Leonel, pero no se puede. Franklin ronca, se mueve en la cama, aparenta pesadilla y lo mantiene despierto.

El delivery de la farmacia era Reinaldo, pero Franklin lo paró en la calle, le quitó la pastilla y los dolores como al principio.

¿Consintió o no consintió?

Leonel debiera ser menos misterioso y jugar menos al equívoco. Divierte lo del ventrílocuo y el muñeco, pero cuando el show termina, el muñeco se calla y habla el ventrílocuo.

Y más si responde a reclamo del público. Franklin ya no es suficiente.