¿Logrará la Junta parar a los partidos?

¿O se acabará la luna de miel JCE-partidos?

Todo el mundo estuvo en eclipse, lo viera o no, y menos por curiosidad científica y más por perder un kilo de peso. ¿Se cumplió o no la promesa?

Bajar de peso sin dejar de comer o sin hacer ejercicio convertía el fenómeno en una dicha ocasional y que los pasados de libra agradecerían que se repitiera con más frecuencia.

Conviene, sin embargo, estar atento a otro eclipse, este de carácter político, y que no se origina en la naturaleza, sino en la calle. La Junta recuerda a los partidos y a los candidatos la Constitución y las leyes, su autoridad como organismo y la obligación de someterse a plazos.

Duro que a un ave le corten las alas en pleno vuelo.

¿Qué harán los partidos y los candidatos si tenían al organismo de elecciones como aliado coyuntural para justificar o legalizar sus actividades? ¿Se recogerán los reformistas y dejarán sin efecto las convocatorias de septiembre? ¿Guardarán los perremeístas sus formularios y seguirán después las inscripciones del padrón? ¿Frenarán de golpe los peledeístas que iban a toda milla?

La Junta se la está jugando, y sin pelota ni bate. ¿Qué harán ahora los partidos?