Los partidos prestaron la batea...
No podían esperar otra actitud del ganador...
El tiempo tiene entre sus virtudes que al pasar comprueba. Se advirtió con alarma el ingreso de sectores nuevos a la política.
Traficantes de drogas, negociantes de gas y dueños de banca.
Cuando se levantó una voz, los partidos miraron hacia otro lado, aun cuando poco a poco se produjo un coro de preocupación. La bolsa fue más importante que la vida, y sin rubor ni disimulo fueron cediéndose espacios importantes de la política a narcos, gaseros y apostadores.
Ahora se protesta la ley de lavado por insuficiente, y los santos inocentes dan la cara y los indiferentes de entonces descubren lo previsible. Los interesados lucharon adentro, defendieron su causa de manera directa y personal, sin usar intermediarios, aunque sí aprovechando las colindancias.
En El Padrino, Vito Corleone la tuvo más difícil. Debió comprar influencias de políticos, senadores y jueces. El padrinazgo de aquí y de ahora no tiene que llegar a esos extremos. El juego postula por sí mismo, y quienes se quejan ahora del lodo, deben recordar las lluvias de antes. No se acabó el jabón, se prestó la batea y cada cual lava por su cuenta.
Dan de alta a la reina Sonia de Noruega tras ser hospitalizada por problemas respiratorios
El FMI eleva del 25 al 40 % el riesgo de recesión en EE. UU. por la guerra arancelaria
Duplantis, Biles, Yamal y el Real Madrid galardonados en los premios Laureus en Madrid
Ataques israelíes matan a 14 en Gaza y destruyen maquinaria pesada para retirar escombros