Ofreciendo con el agua al cuello

Luis Abinader y Maduro coinciden en la oferta...

Ahora sí que Luis afincó y respondió como el empleado público que será si las elecciones presidenciales se decidieran a su favor: aumentará en un 30% los sueldos a los que trabajan en el gobierno.

Había dicho que a los guardias y a los policías, y no se entendía que fuera tan generoso con el estamento armado, con los uniformados, si él era de condición civil.

Parece que repensó la suerte de los miembros de la administración pública y los va a premiar con un alza en cierto modo considerable. Y lo mejor de todo: sin reforma fiscal.

Nunca mejor fecha para hacer el anuncio: el primero de mayo, Día del Trabajo, del trabajador, y no solo del obrero, como se creía en otros tiempos.

Lo malo fue que coincidió con Maduro, el presidente venezolano, que habló en iguales términos. Solo que lo hizo en una Venezuela que no puede ni con su alma y en una circunstancia en que Maduro tiene el agua al cuello.

Igual podría decirse de Luis, quien se recuerda de los empleados públicos cuando electoralmente tiene el agua al cuello, como políticamente Maduro.

¿Sabrán nadar?