Una protesta con perspectiva...
Los partidos aceptan a la Junta, ¿y la calle?
La protesta es siempre un derecho inalienable, pero no solo la protesta, pues a veces los protestatarios pierden la perspectiva.
De 29 delegados y representantes de partidos que hablaron en la maratónica sesión de la Junta, solo uno pidió la renuncia de los magistrados.
Una golondrina no hace verano, pero tampoco invierno, recordó un meteorólogo.
El dato es interesante, pues resulta que los políticos no están coincidiendo con los muchachos que en su indignación se van por la vereda.
Afuera y a la intemperie hay un clima de lucha, y adentro y bajo techo, un ambiente de negociación. La Junta amplió plazos y prometió financiamiento.
¿Cuál sería la real salida al impasse, el extremismo de la calle o el entendimiento a la sombra? Las municipales van en marzo, y nadie propone boicot y con boletas se hará difícil un nuevo sabotaje.
¿Cómo conciliar ambos espíritus, el de combate y el de entrega? Podrán los partidos convencer a los sentados de que se levanten, vuelvan a sus casas y confíen en la consulta del 15.
Más que tarea, necesidad, pues se haría complicado recuperar espacios y fervor si el sector más dinámico prefiere la agitación.
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