Dé el ejemplo...

No permita que su trayectoria política se vea empañada por actos de corrupción como los que día tras día salen al ruedo.

Recuerde que usted juró ante la Asamblea Nacional: “cumplir y hacer cumplir las leyes”, y que el 62 % de los dominicanos lo reelegimos una vez más a usted por cuatro años para que asuma los destino de la nación. Nosotros no elegimos policías, ni jueces, ni fiscales, ni ministros, lo elegimos a usted, de ahí que lo bueno o malo de la administración pública es responsabilidad única, exclusiva y absolutamente suya. ¿Por qué entonces ser permisivo de quieres defraudaron su confianza? No permita que reine la impunidad, pues esos hechos lo comprometen a usted, a su honorabilidad, a su familia, a su memoria histórica, a su legado a éste país que se lo ha dado todo.

No permita que todo ese camino recorrido se vaya por la cuneta. Hoy día vivimos en una nueva sociedad web del conocimiento y la transparencia. Los políticos de ahora deben conocer los códigos actuales de la política y saber que es horizontal, no vertical, donde se impone ser honesto y diáfano.

Por último, ciudadano presidente, debemos tener claro que somos humanos, que morimos, que una vez partimos de esta vida, nuestra trayectoria va a determinar si morimos sólo físicamente, o si también queremos morir moralmente. No juegue con la historia y trabaje para que ella se encargue de eternizarlo y que su nombre sea recordado como hombre de bien, como político honesto, íntegro, el que inició el adecentamiento de la República Dominicana sin corrupción ni impunidad.

Tony Méndez

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