Desigualdad educativa

La ADP retoma sus viejos métodos de lucha

La ADP reta a la población dominicana, no solo al Minerd, al anunciar paros el próximo viernes. Pide un aumento de salario de un 25 %, lo que simplemente es inviable, algo que se maneja como una excusa para paralizar las clases pese al pacto que el sindicato de profesores firmó y con el que se comprometió a respetar el derecho de los niños a recibir las horas completas del curso. 

  El Minerd, por su parte, deberá hoy restablecer puentes con las instituciones firmantes del Pacto por la Educación con las que no mantiene relaciones que puedan catalogarse de fluidas.  La ADP y el Minerd deben entender que  más de dos millones de alumnos de todo el país merecen que se respete su calendario escolar, una mejor preparación docente y un compromiso con su formación que va más allá de las buenas palabras y las inauguraciones. 

  La pandemia ha ensanchado la brecha educativa. Los alumnos de las escuelas públicas han perdido más horas lectivas, han aprendido menos y han desertado de la escuela en mayor proporción que los de la escuela privada. 

Hoy por fin se reúne el Pacto por la Educación, y debería dar buenas noticias.

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