Actitud en la campaña

Vamos a tener que aceptar que la campaña política empezó antes de lo esperado y acostumbrarnos a paros, huelgas, demandas inverosímiles y a tratar de sobrevivir ante los desafueros.

Las campañas políticas en países como el nuestro, no solo les interesan a los políticos, sino que son aprovechadas por cuantos quieren avanzar un interés para chantajear al Gobierno, que no quiere perder “capital político”, y toman a la población de carnada.

Quienes tengan un poco de memoria recordarán que en tiempos de campaña todo el mundo sale a “buscar lo suyo” a la calle. De poco valen las amenazas de las autoridades de que “no tolerarán alteración del orden público”. Los muertos y heridos que se produzcan forman parte del conteo de muertes que no paga nadie y que significan nada para los organizadores.

El consejo es que cuando se anuncie una huelga de choferes, busque un sistema alternativo de transporte o salga más temprano, y el Gobierno, que no se deje coger asando batatas y prepare medidas alternativas. Anunciar que van a reparar autobuses en medio de una huelga solo da risa.