Optimismo y cautela

De la conversación con Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, se desprende la buena posición de República Dominicana con respecto a los demás países de la región.

Las cifras son elocuentes. En vacunación, recuperación de empleos y datos de sectores clave para la economía dominicana como industria, zona franca y turismo.

Pero la situación mundial no permite tantas alegrías. Los precios de los combustibles y las persistentes trabas de la logística mundial están creando una importante inflación, que aquí sorteamos por los subsidios a los combustibles. Pero que poco a poco hay que ir desmontando, como reconocen las autoridades y también los organismos internacionales.

Así, ya enfilados hacia la temporada navideña, puede decirse que el año se ha sorteado con tranquilidad y bien enrumbado pero que muchos de los retos están sin resolver y que resolverlos no depende ni de la buena voluntad ni de las ideas del Gobierno. La clase política anda también sobreexcitada y eso nunca es bueno.