Para entender a los camioneros
Las recurrentes huelgas de Fenatrado, el feudo de Blas Peralta, y la incapacidad del Gobierno para enfrentarlas, tienen una explicación en las características de la sociedad dominicana de hoy.
Cada vez que Fenatrado hace una huelga, o paraliza un puerto o una comunidad, el Gobierno responde que aplicará “todo el peso de la ley” contra los huelguistas, o promete “dar protección” a los empresarios frente a los desmanes de los camioneros.
Y el Gobierno se queda en palabras.
¿A qué se debe la “valentía” de los camioneros frente a las amenazas del Gobierno? ¿Son tan valientes, o saben algo que el resto de los comunes no sabemos?
La realidad es que muchos propietarios de camiones son altos militares y policías y miembros de los partidos políticos con suficiente palanca para que nadie los pueda tocar.
Por eso el Gobierno no actúa.
Esas realidades son las que están desacreditando a esta administración y que le podrían costar muy caro al partido de Gobierno, aparte de que el país no puede soñar con competir mientras una mafia domine el transporte.