El Espía

En los partidos, alrededor de los líderes y candidatos presidenciales, siempre se da una guerrilla entre dos bandos: los radicales kamikazes con vocación de imponer sus criterios o que entre el mar, y los más prudentes que aconsejan las posturas más convenientes a largo plazo. Un cuadro así está pasando con discusiones que se dan dentro del PRD y el PRM, pues algunos quieren quemar municiones hasta el próximo año, pero otros plantean acercamientos desde ya. Esto pone a prueba a los líderes, que deberán ver más allá de la curva.