El regreso de Mr. Zander

Mr. Benjamin Zander está de regreso. Es ese director de orquesta absolutamente maravilloso que piensa muy sinceramente que hay razones para ser feliz. Y que es responsabilidad de cada quien encontrar las suyas.

En estos días tan agitados en los que se añora una cotidianidad menos abrupta, su exhortación a entender las cosas importantes de la vida y poner en el sitio correcto la felicidad es más actual que nunca.

A Mr. Zander la música le habrá salvado de unos cuantos contratiempos; quizá de ahí viene su empeño en que los clásicos lleguen a más gente.

Y en eso andan muchos por estas latitudes. No sólo la Fundación Sinfonía (y sus patrocinadores) y su proyecto con jóvenes de todo el país. También Catana Pérez de Cuello y su programa Ángeles de la Cultura para, desde el Despacho de la Primera Dama, proporcionar educación en artes a niños de barrios y pueblos. Y todas las pequeñas escuelas que dan clases de música, de pintura, de teatro, más por convicción que por dinero...

Educar en Arte es dar herramientas para vivir mejor. Y no sólo las que se identifican siempre: disciplina, perseverancia, sentido del grupo, etc... El Arte ayuda a vivir mejor. A entender mejor a los demás, las culturas, las sociedades y los sentimientos. A disfrutar la belleza. Y eso en medio de tanto ruido y tanto sufrimiento es una necesidad. Por eso es justo que llegue a todos.

Esta noche, en el concierto que dirigirá Mr. Zander, algo de eso se dejará sentir.

IAizpun@diariolibre.com