La simulación y la mentira hechas políticas de Estado

La semana recién transcurrida, la facción de Danilo Medina inició un nuevo relato, a su manera y conveniencia, de los acontecimientos recién ocurridos y que finalmente le impidieron modificar la Constitución para una tercera repostulación del actual presidente de la República. Sus nuevos argumentos, la verdad que mueven a preocupación, pues uno no sabe si es que piensan que la gente es tonta o son ellos los bobos.

Reinaldo Pared, presidente del Senado y secretario general del peledé, en entrevista al Diario Libre, aparecida en la edición del pasado viernes 9 de agosto, hizo una “confesión” sobre unos hechos que solo él y Danilo Medina conocen. El relato se refiere al día en que el secretario de Estado Mike Pompeo llamó a Danilo Medina, el miércoles 10 de julio. Reinaldo pretende con su versión inocular en la opinión pública que esa llamada en nada influyó en la decisión de Danilo Medina y que la real motivación que tuvo para no intentar modificar la Constitución fue su preocupación por la legitimidad. A continuación reproduzco íntegramente lo expresado por Reinaldo Pared.

“Les voy a revelar a ustedes cosas que nada más él (Danilo Medina) y yo dominamos. Ese día él me dijo ‘pasa por mi despacho’. En esa misma mañana, él había hablado con la embajadora (de los Estados Unidos) y le había manifestado ‘lo que había’ y la embajadora le señaló que ellos no tenían ningún tipo de objeción, que nosotros éramos un país soberano; que si todo se hacía conforme a las leyes y a la Constitución no había problemas. Cuando yo llego a las dos y media de ese día, de acuerdo a la llamada a que hice referencia que el Presidente me citó antes de ir al Senado a la sesión, el Presidente me dijo ‘yo te llamo, yo voy a recibir una llamada del secretario de Estado de los Estados Unidos, solamente lo sabes tú, ni Carlitos tu hermano lo sabe, ni los demás. Espera a que yo te llame”. Ya yo estoy en el Senado, se da inicio a la sesión y, de acuerdo con lo que me dijo el presidente, Pompeo le dijo lo mismo (que la embajadora), no obstante me dijo ‘aguanta’ por un asunto de que él (Danilo Medina) le dio mucha importancia al aspecto de la legitimidad de esa reforma y eso pesó mucho en la decisión que él tomó”.

Veamos ahora entre líneas el trasfondo de estas afirmaciones de Reinaldo Pared.

i) Reinaldo, dice “...él (Danilo Medina) había hablado con la embajadora y le había manifestado ‘lo que había’...” Obviamente, “lo que había” era que estaba tomada la decisión de modificar la Constitución. Es por eso que la embajadora de los Estados Unidos le responde que “si todo se hacía conforme a las leyes y a la Constitución no había problemas”. ii) Reinaldo narra que ya estando en el Senado, el presidente lo llama y le dice que Mike Pompeo dijo lo mismo que la embajadora y que Danilo le dijo “aguanta”, refiriéndose a que detuviera la presentación del proyecto de ley para declarar la necesidad de modificar la Constitución, como efectivamente hizo. Contrario a lo que Reinaldo deduce, esto es, que la embajadora y Mike Pompeo le estaban dando su consentimiento, en realidad lo que ambos le estaban haciendo a Danilo era una muy clara advertencia. Como debía leerse la respuesta que ambos le dieron era: ‘Si la modificación no se hace conforme a las leyes y a la Constitución habrá problemas’. Y era evidente que la modificación no se podía hacer conforme a la Constitución y las leyes. La realidad era que la facción de Danilo no contaba con el número suficiente de legisladores y solo podía alcanzarlo comprando congresistas y se trataría de otra reforma espuria de la Constitución. Por eso Danilo, quien si captó el mensaje velado, se atemorizó y le dijo a Reinaldo “aguanta”, esto es, detén la presentación del proyecto de ley en el Senado.

Reinaldo pretende que creamos que el proyecto no se presentó porque de pronto a Danilo Medina le preocupó su legitimidad. ¡Que coincidencia! Justo después de las advertencias de la embajadora y de Pompeo. No olvidemos que Danilo Medina fue quien en el 2015 propició una modificación de la Constitución, para su propio beneficio, —su repostulación y reelección—, y a esos fines compró legisladores con dinero sucio de Odebrecht y de Punta Catalina y terminó siendo reelecto en unas elecciones altamente cuestionadas. Además, la decisión estaba tomada, pues como revela Reinaldo, el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, Flavio Darío Espinal, ya había elaborado el proyecto de ley, sin dudas, por encargo de Danilo Medina y estaba decidido que el senador Charlie Mariotti lo presentaría el día que “por casualidad” se produjo la llamada de Mike Pompeo, luego de la cual el presidente le dijo a Reinaldo: “aguanta”.

Del relato de Reinaldo, nos debe llevar a reflexión saber que tenemos un presidente de la República y un presidente del Senado y de la Asamblea Nacional que supediten sus decisiones —correctas o incorrectas— a la valoración que haga una embajadora y un secretario de Estado extranjeros. Un país así ¿puede llamarse soberano? El partido fundado para la “liberación” nacional terminó consolidándonos como una república bananera más.

Guillermo Moreno es abogado y político. Presidente de Alianza País.