Gracias a la vida

Deseo que muchos podamos brindar hasta por los que lloran. (Foto: Shutterstock)

SANTO DOMINGO. Como dice la canción de la chilena Mercedes Sosa: “Gracias a la vida que me ha dado tanto, me dio dos luceros, que cuando los abro, perfecto, distingo lo negro del blanco, y en el alto cielo su fondo estrellado. Gracias a la vida que me ha dado tanto, me ha dado el sonido y el abecedario, con él las palabras que pienso y declaro: madre, amigo, hermanos y luz alumbrada, la ruta del alma de quien estoy amando...”

Yo brindo por la paz de nuestros ciudadanos que sufren y por los que tienen que ayudar a eliminar sufrimientos, enfermedades y pobreza. Brindo por la caridad de dar la mano a quien lo necesite. En fin, que brindo por conseguir lo que pide mi corazón, por lo que brota de mi alma, porque sea algo bueno que llegue antes de finalizar el año. Brindo por el año que se nos despide y por el que vuelve.

Sé que han pasado muchos años y en uno ha llegado la felicidad y otro, tristezas, y, a pesar de los pesares, continúo brindando hacia el cielo por ti y por mí, por lo que nos ha dado la vida, y porque todos “demos gracias a la vida que nos ha dado tanto”.

Sé que algunos brindarán y otros llorarán. Y es que la vida es quien nos cambia, nos critica o nos ayuda por aquí y por allá.

Deseo que muchos podamos brindar hasta por los que lloran.