Miel sobre hojuelas

La Junta está dividida. Los desencuentros personales terminaron por causar problemas institucionales. La crisis, ahora, es de credibilidad. La ciudadanía observa el progresivo deterioro de la convivencia interna en el organismo. La democracia criolla, que es sobre todo electoral, ha puesto siempre esmerada atención en pulir todo lo relativo a la organización y arbitraje de los procesos comiciales. Los cambios y ajustes de todo tipo lo atestiguan. El país atacado por graves problemas en todos los flancos no merece que se le destartale la JCE. Los miembros deben recuperar su química personal y todo volverá a marchar como miel sobre hojuelas. hfigueroa@diariolibre.com