El humano es un comercio malo

En ocasiones, la detención de un ciudadano chino, un cubano o un venezolano es lo que avisa. Algo ocurre en Dominicana por el frecuente trasiego de personas de otras nacionalidades, y ni qué decir que respecto a los haitianos se trata del pan nuestro de cada día. La inmigración ilegal o la trata de personas no es algo que sólo ocurre en nuestro país. Europa completa podría ilustrar de la mejor manera lo que es considerado el fenómeno social dominante del siglo XXI. Los dominicanos debemos tener más solidaridad y más acogida para los migrantes, pero con lo que no se puede contemporizar es con el encubrimiento de mafias que trafican con personas, en particular mujeres que se venden o son vendidas al mejor postor.