Haití: drama indescriptible

Las iglesias Episcopal, Protestante y Católica de Haití, movidas por lo que califican de “pesadilla indescriptible que va de mal en peor”, claman de manera conjunta por un alto a la violencia, al tiempo que demandan crear un corredor humanitario de circulación para atender las emergencias. La población carece de comida y de agua; no hay combustibles y a los hospitales, sin aprovisionamiento, no pueden acceder las ambulancias por el bloqueo de calles. Dicen estas iglesias que desde 1986 Haití no había vivido una crisis tan intensa y compleja como la actual, lo que debe operar como un llamado de atención al Gobierno dominicano, porque de ahí a un desborde migratorio, a una avalancha, habría un solo y muy doloroso paso.