La Justicia y Jordi Veras

La relevancia del caso Jordi y la incesante defensa de Negro Veras a su hijo, expresan no sólo el derecho de su familia a vivir sin temor al crimen organizado, sino el de toda la sociedad. Se estima que justicia que tarda no es tal, pero la sentencia que se acaba de dictar, seis años después, es inspiradora y motiva a nunca desmayar en los tribunales frente al crimen y la delincuencia, pese a maniobras retardatarias y chicanas para eternizar los procesos. Las pruebas contra Adriano Román y sus sicarios resultaron imbatibles, y por ahora la sociedad respira aliviada.