La política y los empleos

Siempre que hay cambio de gobierno cunde la incertidumbre entre empleados públicos porque el funcionario que llega lo hace con su gente, sea por mérito político o profesional. Por suerte las nuevas autoridades están enviando señales de respeto a la ley de servicio civil y carrera administrativa, lo que garantizaría que con las naturales remociones que se produzcan no haya zozobra ni se corra el riesgo de que se desplacen capacidades técnicas y administrativas y en algunos casos hasta científicas. Los que se fajaron en la campaña merecen ser atendidos, pero no para desgracia de los que hayan tenido un buen desempeño ni de quienes, en atención a sus años en un puesto, es probable que no se trate de improvisados.