Madre es solo una

Un pasaje del escritor español Castro y Serrano reza: “La amada dice a su amado, en el momento de peligro: ‘¡Muramos juntos!’ Pero la madre dice al hijo: ‘¡Sálvate tú!’”. Y es un ejemplo universal cuando tuvo el rey Salomón que amenazar con partir por la mitad el bebé que se disputaban dos mujeres para saber de inmediato cuál era la verdadera madre, que no fue otra que la que prefirió que su rival se lo quedara antes que permitir que dañaran al hijo salido de sus entrañas. Y como la glorifica Trina de Moya en su himno: “Cantemos de las madres/ la ternura, el afán/ y su noble atributo/ de abnegación sin par”. Loor a las madres dominicanas y con ellas a todas las mujeres del mundo que se abren camino con su propio esfuerzo.