Tiempo de payasos

La idea ha muerto, vive el espectáculo. En la política no se impone el que mejor piense, sino el que mejor presente. La forma terminó por vencer al fondo. Es un fenómeno mundial. Mírese Italia, el triunfo de dos payasos, dos hombres del "show business", uno que vive de la comedia y otro que tiene una vida de comedia, Grillo y Berlusconi. Los italianos se volcaron con pasión a votar las peores opciones. El serio y muy capaz de Monti, sin embargo, fue ignorado. Muy cerca, en Venezuela, gobierna un Cid herido. La política es un circo. Tiempo de payasos. hfigueroa@diariolibre.com