Yo me quedo en casa

Las palabras me rondan y les sigo la pista. En tiempos de pandemia le echo un vistazo a la pequeña partícula pan-, un elemento compositivo de origen griego que significa ‘totalidad’, como nos recuerda el Diccionario de la lengua española.

Nada más panhispánico que la lengua española. Con las mismas herramientas léxicas (pan- + sustantivo/adjetivo) se forma toda una familia de palabras: panamericano, panafricanismo, pangermánico, paneslavo.

La sorpresa está garantizada cuando de profundizar en las palabras se trata. Miren lo que he encontrado en el DLE sobre la etimología de la humilde panorama, un préstamo procedente del inglés. El pintor irlandés de finales del siglo XVIII Robert Barker realizó con enorme éxito una serie de pinturas circulares de grandes dimensiones que producían la ilusión óptica de ver la imagen en 360 grados. A estas pinturas las denominó «panoramas», a partir de los griegos pan- ‘totalidad’ y hórama ‘vista’.

También tiene origen griego una curiosa pareja de sustantivos. Para aludir a un sistema filosófico que identifica a Dios con el universo disponemos del término panteísmo (nuevamente de pan- y el griego theós ‘dios’); para referirnos a un lugar en el que hay ruido y confusión tenemos la voz pandemonio, o su variante pandemónium, (otra vez pan- y daimónion ‘demonio’), que denominaba la ‘capital imaginaria del reino infernal’.

En estos tiempos de pandemia, en los que nuestra vida se ha convertido en un extraño pandemonio, solo nos queda esperar que la ciencia y los científicos, a los que siempre olvidamos en nuestros presupuestos, encuentren la panacea. Mientras tanto, la única panacea que existe está en tus manos: quédate en casa.

María José Rincón González, filóloga y lexicógrafa. Apasionada de las palabras, también desde la letra Zeta de la Academia Dominicana de la Lengua.