Inicia el 2022 libre de deudas con estas claves

La coach financiera Teresa Sánchez comparte las claves para que este nuevo año salgamos de una vez por todas de las deudas

Tú tienes el poder de transformar tus finanzas y hacer de este nuevo año uno de provecho. (Shutterstock)

Al iniciar un nuevo año, es normal plantearnos metas. En esa lista, no es de extrañar hacer una mención especial a mejorar nuestro estatus financiero, específicamente saldar las deudas, esas que tanto dolor de cabeza nos provocan, pero de las que parece casi imposible librarnos.

Siendo sinceros, las deudas se han convertido en un mal necesario para la mayoría. Esto, según explica la creadora del espacio @mibienestar.financiero, Teresa Sánchez, porque las hemos normalizado a tal punto de adoptar la creencia de que endeudarnos es la única vía de progreso económico. 

Entonces, casi sin darnos cuenta, construimos un espiral de deudas, el cual pasa de un manejo controlado al sobreendeudamiento, siendo este último el punto que nos aleja de la capacidad de construir bienestar a través de nuestros ingresos.

Pero como el propósito no es asustarte, sino dejarte saber que, siempre que exista la intención y disposición, es posible recomponer nuestras finanzas, la coach financiera nos comparte los pasos a seguir para comenzar el año con buen pie y saldar las deudas en este 2022.

1. Clasifica según la naturaleza: a) Deudas que construyen patrimonio o interés compuesto. b) Deudas de consumo, esas compras que haces desde la falta de presupuesto, emoción, impulso, por encajar en un grupo y cualquier otra razón.

-Reconocer. Este paso es la base de todo cambio. Debes darte cuenta de qué es lo que hace que te endeudes. Deja de poner la responsabilidad afuera, en cómo funcionan las cosas, en tu familia, en tus ingresos. 

Acepta que has estado fuera de control por mucho tiempo, tomando la vía más fácil, que es el método “deuda apalanca deuda”, el cual consiste en querer algo y tenerlo al momento, sin esperar, ahorrar o presupuestar, ya que eso es considerado una pérdida de tiempo. Sin embargo, a menos que se trate de una catástrofe de salud o natural, no debería ser así.

-Renegociar. Bien reza una frase popular que no hay peor diligencia que aquella que no se hace. Renegocia tus deudas con tus acreedores. Aunque no lo creas, reacomodar pagos, cuotas y tiempo es posible si te acercas a tu institución financiera. Negocia de manera asertiva y comprometida los cambios que quieres.

-Abonar o saldar. Una vez hayas identificado, clasificado y ordenado tus deudas, es tiempo de decidir cuál se puede abonar o saldar. Ten presente que elegir cuál de estas se puede saldar es básico para que puedas tener resultados duraderos en tu meta.

Periodista de Revista. Me apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.