Cinco beneficios del "Dry January"

Enero no solo es el principio de un nuevo año, también es el inicio de la época en la que todos tratan de hacer realidad las resoluciones durante la Nochevieja.

Una de las promesas más comunes después de una temporada de festividades es dejar a un lado el alcohol (por lo menos por un mes). 

Más que una promesa para asumir un estilo de vida más saludable, esta popular resolución se ha convertido en una iniciativa conocida como “Dry january” “Enero seco” y que consiste en dejar de tomar bebidas alcohólicas por el resto del mes de enero.

Ideado en el 2013 por la organización benéfica Alcohol Change de Reino Unido, este reto fue creado para promover un estilo de vida más saludable, además de proveer las personas que lo intenten una oportunidad para reflexionar sobre sus hábitos de consumo, empezar de cero y fomentar la conciencia sobre el consumo de alcohol.

En los últimos años el "Dry January" se ha ido volviendo más popular y cada vez más organizaciones de salud y bienestar la han ido respaldando. Entre los beneficios de asumir el reto de un “enero seco” están:

Ahorro de dinero

Muchas personas se sorprenden cuando caen en cuenta de que el acto de abstenerse de consumir alcohol también puede presentar una oportunidad para ahorrar dinero.

Esto es evidente cuando caen en cuenta de la cantidad de dinero que se gasta en alcohol durante un período de tiempo y que pueden ahorrar durante el reto de “Dry January”. 

Es decir que disminuir el consumo de bebidas alcohólicas puede ser beneficioso tanto económicamente como para establecer hábitos financieros saludables.

Fomenta la creación de nuevos hábitos

Completar este desafío puede inspirar a cualquier persona a optar por practicar nuevos hábitos relacionados con una vida más saludable. Por ejemplo, de acuerdo a los organizadores del reto, alrededor de un 70% de los participantes mejoran su forma de beber, ya que lo hace de una manera más consciente. 

Mejor calidad de sueño 

El alcohol en sí es un sedante, pero, aunque te permita dormir más rápido, tiene un impacto negativo en tu calidad de sueño ya que no permite conciliar ese sueño profundo que es necesario para la salud y la recuperación general. Esto implica despertarse más cansado y exhausto.

Por otro lado, mientras más se disminuye el consumo de alcohol se puede notar una mejor calidad de sueño y mayores niveles de energía.