Jesús Paniagua: “He tratado de aprender de los grandes narradores”

Es el autor de Memorias de una mula, novela publicada por editorial Planeta

Jesús Paniagua, escritor dominicano. Foto: Danelis Sena

Jesús Paniagua, joven escritor dominicano, pertenece a las últimas hornadas literarias y es de los pocos del solar que han saltado al ruedo exterior con la publicación de Memorias de una mula, novela relativa al narcotráfico, tema al que se le ha sacado mucho provecho en el extranjero, pero que sigue estando pendiente en la narrativa dominicana.

El autor cuenta que ha tratado de aprender de los grandes narradores, como Mario Vargas Llosa, Truman Capote, Vladimir Nabokov y de su amigo Luis Beiro, al que considera su “padre literario”.

En relación a su obra, publicada por la reconocida editorial Planeta, a la forma en que se acercó a la escritura, a sus experiencias y expectativas, respondió preguntas para Ruta de Letras, de Diario Libre.

El año pasado dio un gran paso con la divulgación de su novela Memorias de una mula, publicada por editorial Planeta de México. ¿Cómo ha sido recibida esta obra en el país y en el exterior?

¿Cómo lo consiguió publicar con Planeta de México?

La verdad que yo solo escribí la historia. Todo el mérito de la publicación es para mi agencia literaria.

Aunque ha publicado ya tres libros, muchas personas no saben que es ingeniero y que vive y produce en el país. Cuéntenos un poco sobre su formación profesional y sus vivencias.

Me gradué de Ingeniería Civil, y a esto le dedico mis labores de proyectos de vivienda económicas, así como al sector privado. Pero, mis mayores esfuerzos los concentro en nuestra empresa matriz y familiar.

¿Está escribiendo otra novela? ¿Qué más quiere hacer en literatura?

Tengo un tiempo trabajando en algo, pero todavía son esbozos. En estos momentos, más que escribir, leo e investigo. De la literatura puede que no quiera nada más que narrar historias.

Cuando escribe, ¿qué importancia le concede al fondo y a la forma?

Son las piezas más importantes a la hora de concebir un proyecto literario. También constituyen mis grandes dolores de cabeza. La intención de la obra siempre nace de la profunda inconformidad que tengo respecto al tema a tratar. Y siempre busco diferentes formas creativas de quién o quiénes, cómo y por qué, van a contar esa historia.

¿Cuáles autores de la actualidad o del pasado son fundamentales para usted?

De la actualidad, Guillermo Arriaga. Una de las primeras novelas que leí fue El dulce olor a muerte. Arraiga tiene un lenguaje directo, utiliza muchos verbos accionados lo que permite que la narración avance, no le da al lector chance a bostezos. Y del pasado, que son quizás los autores que más releeo: Hemingway y Albert Camus.

¿Qué aspira que sienta el público al leer sus obras?

Escribo para salir del mundo que me circunda que es, a todas luces, infinitamente más mediocre que las vidas contadas por los novelistas. El simple hecho que yo pueda compartir una historia con los lectores, que pueda junto a ellos salir por un momento de este mundo, es mi norte.