Disruptivo, libre y rebelde: así fue el espectáculo de Rosalía en República Dominicana

Como si se tratara de un lienzo en blanco, Rosalía pintó el escenario de Altos de Chavón con su arte disruptivo, rebelde y libre en su primer concierto en República Dominicana

Pasados 30 minutos de las nueve de la noche y tras la exclamación activa del público, la española subió al escenario acompañada de ocho bailarines, quienes fueron un elemento esencial  del espectáculo: actuaban, asistían a la artista, agregaban y  quitaban elementos del escenario y en ocasiones sostenían las cámaras que brindaban un acceso más directo del público con la artista.

La artista que se presentó la noche del sábado en La Romana optó por un concepto minimalista para su escenografía donde el principal atractivo fue ella y su voz. 

Haciéndose acompañar de dos pantallas que transmitían en vivo cada uno de sus movimientos, la Motomami inició su show con las canciones "Saoko", "Candy", "Bizcochito" y "La fama".

RD: un destino de inspiración

Antes de interpretar "Dolerme" la ganadora del Grammy Latino compartió su amor y valoración por República Dominicana al afirmar que este destino ha sido un motor de inspiración para su última producción discográfica. 

El espectáculo contó con dos enormes pantallas que transmitían en vivo los movimientos desde una óptica más cercana, simulando teléfonos, cortes de tiktok o un video clip, la española y su equipo utilizó más de 10 cámaras para capturar desde diferentes ángulos los movimientos de la artista.

Sin duda con este formato innovador la interprete de "Despechá" cubrió los elementos tradicionales que se acostumbran a ver en los espectáculos locales.

Espacio para la inclusión

Al igual que en el concierto de Coldplay, en el show de Rosalía había espacio para la inclusión con la aplicación de una tecnología que le permitía a personas con discapacidad auditiva sentir la música y sus vibraciones. 

En esta ocasión la fundación María Batlle llevó a 10 jóvenes a disfrutar del espectáculo, utilizando mochilas que les permitía sentir las vibraciones y al mismo tiempo con una maestra que narraba en lenguaje de señas las exóticas letras de Rosalía.

Demostrando que es muy de ella y que se transforma, Rosalía se movió entre flamenco, bachata, bulería, reguetón, jazz, zamba y otros ritmos al interpretar más de 30 canciones en su enérgico y conceptual espectáculo.

Rosalia anunció que algunos de los temas interpretados en Altos de Chavón estarán en su próximo disco “Motomami deluxe”, que será presentado el próximo viernes.

Periodista, creadora de contenido y emprendedora. Amo bailar, viajar y comer. Me apasiona escribir sobre temas que empoderen y motiven a la gente, entre estos: viajes, bienestar y sexo.