El talento joven le ha dado un gran impulso al merengue

El relevo que siempre se ha reclamado en el merengue, parece que ya llegó. Nuevos exponentes han hecho fusiones con el género con el propósito de conectar con su generación, mientras que artistas de larga trayectoria se han cobijado junto a exponentes que ya han trillado un camino en el sonido urbano.

Protagonistas del arte popular, así como críticos, han atribuido el poco interés de un segmento de la población al hecho de que los exponentes tradicionales del merengue no se han reinventado con el propósito de ganar el aplauso de la juventud. Otros, en cambio lo han atribuido a que cada generación tiene su música, por lo que con las diferentes corrientes urbanas no tienen competencia.

En medio de ambos planteamientos, hay una nueva camada de solistas que busca marcar su territorio con una apuesta orgánica en la que ha incluido al merengue, en ella figuran entre otros, León Yamil junto a su agrupación Be Crazy; Gabriel; Vicente García; Manny Cruz, Janio Lora, Vladimir Dotel y Vakeró, que se han ocupado de darle un nuevo aire al ritmo.

El grupo Be Crazy, por ejemplo, ha hecho colaboraciones junto a Manny Cruz, pero también ha buscado la sombra de una figura trascendental como Johnny Ventura junto al que estrenaron hace poco tiempo “Mi Estrella”, una composición de León Yamil y Ventura.

El más reciente tema de Gabriel lo mantiene pegado a la música vernácula. El proyecto discográfico en el que trabaja incluye una especie de reconocimiento a figuras que marcaron una época en el merengue. En “Morísoñando”, nombre que da título al álbum, tendrá como invitados a Johnny Ventura, Wilfrido Vargas, Eddy Herrera, Jossie Esteban, Alex Bueno, Los Hermanos Rosario y Fernando Villalona.

En busca de un nuevo nicho

El veterano Fernando Villalona se alió a Vakeró en “Que nadie me controle”, título que viene a refrescar el repertorio del Mayimbe. La canción le abre las puertas al legendario intérprete, suena esta vez de las manos de uno de los exponentes urbanos más sólidos.

Tras la conquista del público joven, sin alejarse de su esencia, también están Milly Quezada y Aramis Camilo. La reina del merengue se la jugó de las manos de Vladimir Dotel, líder de Ilegales, teniendo como productor a Antonio González con el merengue que mejor nombre no pudo tener: De colores, tema que de inmediato hizo click con el mercado meta.

Aramis Camilo, perteneciente a la llamada era de “Los años dorados del merengue” que dominó las décadas de los años 80 y 90 también decidió montarse en el tren de los cambios. La experiencia y talento del cantante Papy Sánchez lo llevó a realizar el remix de su emblemático merengue “El motor”.

“Voy a romper tus fotos” ha traído al escenario al merenguero típico Krisspy y se suma a la ola. “Independientemente de lo que está sucediendo en la capital, que es muy positivo, en Santiago nunca se ha dejado de consumir el merengue típico o el de orquestas”, ha dicho a DL.

Dioni Fernández es uno de los pilares de la música criolla. De sólida trayectoria como productor, arreglista y padrino de figuras que se desarrollaron en su banda, para posteriormente brillar con luz propia.

Consciente de lo que consume el público ha incorporado a su agrupación caras nuevas a las que produjo un medley de merengue urbano con canciones de Sebastián Yatra, Nicky Jam, J Balvin, Daddy Yankee y Don Omar. “Nosotros venimos experimentando con la música urbana que se ha pegado, pero llevándola a merengue y de esa forma nació ese mosaico de temas de estos famosos reguetoneros y a la gente le gusta mucho porque son canciones muy conocidas y nos está dando resultados”, precisó el músico.

Lo mismo hizo recientemente Wilfrido Vargas. “El Cuchicheo”, título de uno de los temas que conformará el nuevo álbum lo mete en la pelea para conquistar al público y de paso recordar que siempre ha sido un abanderado de los cambios en la música.