Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Diseño de modas
Diseño de modas

Silvia Tcherassi: “La moda no tiene nacionalidad”

El equipo detrás de Dominicana Moda llevaba unos años soñando con traerla al país, hasta que en esta 12 edición, lo consiguió. Silvia Tcherassi, colombiana nacida en Barranquilla, agotó una agenda muy complicada los días que estuvo en la ciudad. Pero tuvimos el chance de conseguir que contestara para el equipo de Estilos unas cuantas preguntas sobre el potencial de la moda Latinoamericana, los desafíos que ha tenido que enfrentar como diseñadora y los parámetros que rigen esta industria, influenciando la vida del ser humano.

¿En base a qué o cuáles principios ha ido construyendo Silvia Tcherassi su trabajo como diseñadora? Mi trabajo se ha basado en una permanente exploración, en un compromiso con la innovación y en la búsqueda constante de inspiración. Me gusta sintetizar los extremos y experimentar pero siempre siendo fiel a mi estilo. Cada colección muestra una faceta de ese estilo, que es el mismo desde los comienzos... un lujo casual, sin pretensiones y excesos.

Cuáles son los errores más comunes que se comenten en nombre de la moda, y no me refiero exclusivamente a la hora de vestir... Ser víctima de la moda por tratar de llevar la última tendencia, sin importar que nos quede bien o no vaya con nuestro estilo de vida.

¿Cómo cree usted que se va perfilando la moda latinoamericana y del Caribe? ¿Tiene potencial para abrirse espacio en el exterior? Para mi la moda no tiene nacionalidad, pero si te podría decir que la propuesta de moda de los diseñadores latinoamericanos y en especial los del Caribe “ya” tiene presencia internacional. Grandes figuras como Oscar de la Renta y Carolina Herrera abrieron las puertas, a mi me tocó el honor de ser la primera latinoamericana en ser invitada a las semanas de la moda de Milano y París y hay muchos otros talentos de la región hoy brillan con luz propia. Espero que en el futuro, surjan más nombres y más marcas en nuestra región.

Ha diferencia de otras profesiones, la industria de la moda y el diseño, tiene una presencia importante de mujeres. ¿Qué desafíos ha encontrado como mujer y como profesional en este mercado? Parece paradójico pero en una industria que ha crecido sobre los hombros y con las manos de las mujeres, apenas hay una mujer como directora creativa de una casa de alta costura francesa en la actualidad: María Grazia Chiuri en Dior. Debieran ser muchas más. El mayor desafío que encontramos, como toda mujer con una carrera, es balancear nuestra vida personal y profesional. Pero el mensaje es que si se puede lograr un balance exitoso, es lo que llamo “nuevo feminismo” y le dediqué un capítulo de mi libro “Elegancia sin Esfuerzo”.

Cuando la moda se vuelve más comercial, ¿pierde calidad o esencia? Si comercial es sinónimo de exitoso y reconocido, no tiene que perder calidad o esencia. Una cartera de Hermès o un reloj de Cartier tienen mucho éxito comercial y siguen siendo fieles al espíritu de la marca y piezas de alta calidad. Si te refieres a comercial como sinónimo de masivo, genérico o sin un punto de vista, si te podría decir que la masificación hace que se pierda cierto encanto y exclusividad, que creo que es lo que ha hecho a la moda aspiracional por tanto tiempo.

¿Qué desafíos tienen delante los diseñadores emergentes? Abrirse paso en un mercado global, dinámico y competitivo que está controlado por un duopolio de las empresas del lujo. Pero al mismo tiempo, las redes sociales hoy les brindan oportunidades para darse a conocer que hace solo 10 años no existían. Pero el desafío más grande es tener un lenguaje propio, eso es lo único que les puede garantizar un espacio seguro en ese mercado.

Si escucha el termino de “moda globalizada”, ¿qué le llega a la mente? Una moda hecha para los ciudadanos del mundo. Para mi los términos globalizado y globalistas no tienen una connotación negativa, son el resultado natural y lógico del mundo interconectado en que vivimos hoy.

Las personas tienden a querer ir tras las tendencias de la moda, aunque para ella sean inalcanzables, ya sea porque no tienen el dinero para adquirirlo y porque no tienen el cuerpo para usarlas. ¿Esto podría hacer de la moda una industria excluyente? Creo que como en todo mercado hay una oferta y una demanda y cada cual tiene que encontrar algo que vaya de acuerdo con su gusto y su presupuesto. Y para los que tienen buen gusto y quieren estar a la moda pero no cuentan con los recursos necesarios cada vez hay más alternativas como los outlets de marcas reconocidas, las colaboraciones entre los diseñadores y retailers como H&M y hasta el mercado online de prendas de segunda. Además hay diseñadores emergentes con propuestas muy buenas y que no son costosas. Para terminar esta pregunta, quiero decir que siempre he pensado que el buen gusto no tiene que ver con el nivel de riqueza, si así fuera todas las mujeres ricas se vistieran bien, y sabemos que no es así.

¿Cree que de alguna forma la moda ha construido y perpetuado una imagen de cómo debe ser el cuerpo y/o apariencia de la mujer? Siempre he dicho que en este tema la moda es en parte responsable pero no la única responsable, las marcas de consumo masivo, la publicidad, los medios, los estilistas y los fotógrafos, entre otros, también tienen responsabilidad. En lo que a la moda respecta, hemos visto un esfuerzo que se hace evidente en las pasarelas del mundo, por presentar una moda más diversa e incluyente.

Fotos: Jerameel Reyes.

TEMAS -