El proceso detrás de la fabricación de joyas con Cindy Martínez
La diseñadora de joyas muestra los pasos para elaborar un anillo
María Isabel Hiraldo
Si alguna vez has escuchado por ahí términos como fundición, maleabilidad, ductilidad o laminado, probablemente desconozcas que significan, a menos que estés inmerso en el mundo de la orfebrería. Detrás de la belleza y elegancia de una joya existen una serie de técnicas que se implementan para su elaboración, así como las talentosas manos de un artesano.
Dentro de los artífices capaces de convertir una piedra o metal que, ante los ojos comunes, sea visto como un “simple” objeto con aspecto rústico, en una auténtica y preciosa pieza de joyería, está la diseñadora de joyas Cindy Martínez, quien incursionó en el oficio hace seis años tras dejar el trabajo que tenía para emprender su propio camino.
Para la fabricación de una joya es importante tener pendiente varios aspectos fundamentales, como determinar el diseño, escoger los materiales adecuados y disponer del tiempo necesario para su confección. En Estilos hemos querido pasar de la teoría a la práctica y es por esto que Cindy Martínez mostrará todo el proceso que envuelve hacer un anillo.
Fundir la plata
Lo primero que se hace es fundir la plata, para eso se utiliza el crisol (recipiente de material refractario que sirve para fundir el metal a temperaturas muy altas). Cuando llega al punto que la plata ya está líquida y se ve en un tono rojizo, se procede a vertir a la lingotera.
Retirar la plata de la lingotera y llevar al laminador
Con una pinza se lleva al ácido y luego al agua para que el metal se enfrié. Se seca el metal y se procede a llevar al laminador para darle la forma por cada uno de los canales hasta obtener el grosor deseado. Se va alternando para estirar el metal y se va recosiendo.
Cortar el metal
Se procede a cortar a la medida que el cliente lo solicita y también las esquinas del metal. Luego se le da la forma cilindra, se unen las dos puntas para soldar, se recose el aro para posteriormente darle calor por todos lados.
Soldar
En las dos esquinas del aro que no están unidas se procede a la soldadura y se reviste con un poco de sal de bórax para que el fúndente hale rápidamente y se adhiera con mayor facilidad. Luego de agotado este proceso se le coloca el soplete directamente para que se ensamblen las esquinas del anillo, luego se pasa por la parte del óxido y después al agua para enfriar.
Limar, lijar y pulir
Este proceso consiste en dejar la pieza metálica libre de asperezas tanto el interior como el exterior de la misma. Generalmente se utilizan diferentes tipos de limas para lograr un mejor acabado. El lijado va a darle una terminación más limpia a la pieza, ya que quitará todas las imperfecciones que el limado no pudo quitar. Una vez perfectamente lijado la pieza queda lista para la siguiente etapa.
Mientras que el pulido va a proporcionarle a la pieza el color característico de la plata. Este proceso requiere de mucho cuidado y precisión, especialmente cuando se trabaja con piezas en las cuales han sido engastadas piedras preciosas.
Formación de Cindy Martínez
Sobre la trayectoria de Cindy Martínez, cuenta que, aunque la joyería le apasionaba desde hace mucho tiempo, sus primeros pasos en el área se dieron durante su segundo embarazo, luego de que el padre de sus hijos quedó desempleado. Los primeros trabajos que realizó fue en la parte de la bisutería, pero con el paso del tiempo ha ido explorando otros materiales y técnicas.
En cuanto a su preparación, se formó como auxiliar de joyería en el Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (Infotep) y en la Fundación para el Desarrollo de la Artesanía (Fundarte). Actualmente, cursa la carrera de artes industriales mención diseño artesanal en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
“He adquirido también varios libros de joyería, además de que tengo amigos joyeros muy especiales que siempre han velado por mi educación y porque cada día vaya perfeccionándome en esta industria, porque muchas veces entendemos que podemos diseñar de la nada, sin tener un concepto definido y sin indagar sobre la historia de la joyería”, comenta.
Las joyas más valiosas de Cindy Martínez son sus dos hijos, Maite y Akon Lasose Martínez, quienes son su fuerza motriz para continuar cada día y la motivan siempre a dar lo mejor de sí misma.
María Isabel HiraldoPeriodista de Diario Libre.
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