Cómo hacer menos costosas las elecciones

Cuando se analizan las cifras de lo que cuestan las elecciones dominicanas, hay que concluir que ningún país del mundo se puede dar el lujo de gastar tanto dinero en la elección de sus autoridades.

El costo de sostener a la Junta Central Electoral, a los partidos políticos reconocidos y a la justicia electoral supera con mucho lo que un país de nuestro tamaño y población debiera invertir en esa actividad cívica.

Y no estamos sumando las contribuciones que reciben los partidos del sector privado y el dinero no tan limpio que se mueve en ocasión de las elecciones.

El Estado dominicano, es decir, los contribuyentes, yo, tú, ella, él, nosotros, vosotros y ellos, invierte en asuntos electorales más de RD$20 mil millones en cuatro años.

No me atrevo a decir lo que se puede hacer con ese dinero.

Sólo con el presupuesto de los partidos se podría construir hospitales y escuelas en todas las provincias del país. Sólo con el presupuesto del Tribunal Superior Electoral se podría crear muchos de los tribunales civiles y penales que demanda nuestro sobrecargado sistema de justicia.

Y ustedes se preguntarán, ¿y qué hacer con la justicia electoral? Lo que han hecho otras naciones es la respuesta. Se crea un tribunal especial, con jueces del actual sistema judicial, que conozca de los asuntos cuando se presenten y devolver las atribuciones sobre el estado civil que tiene actualmente el TSE a los tribunales ordinarios.

Otra economía vendría de campañas más cortas y del control de la publicidad para igualar las ofertas.

Existen muchas ideas más que invito a aportar.

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Adriano Miguel Tejada