Una campaña con interrogantes

Esta campaña luce sumamente interesante, aunque peligrosa en términos de conflictividad, por una serie de interrogantes que se agregan y que crean unas condiciones poco vistas en nuestros torneos electorales.

1. Aunque en otros comicios han combatido tres fuerzas con poder para influir en el resultado, nunca antes el antagonismo entre dos de esas fuerzas se había manifestado de manera tan evidente como en estas elecciones, lo que probablemente conducirá a una meta no deseada por ninguno: una segunda vuelta electoral de resultado impredecible.

2. Aunque la actitud desafiante de Leonel Fernández contra la Junta Central Electoral pudiera poner a algunos a pensar la posibilidad de que se retire, esto es punto menos que imposible, porque más que nunca, Leonel necesita el financiamiento que otorga sacar más del 5 por ciento de los votos.

Todas las encuestas le dan ese umbral con holgura. Su problema, para quedar bien, es conseguir que el 5 por ciento lo logren tanto la Fuerza del Pueblo como el Partido Reformista Social Cristiano, porque si los votos se van para donde Quique, no es verdad que ese político curtido en las galleras, va a soltar un centavo.

3. El otro actor en el drama, aunque no figura en los créditos de la película, es Danilo Medina y su equipo. Todo indica que en una eventual victoria de Luis Abinader, éste tendrá que tirarle un poco de carne a las fieras que tratarán de sacar de circulación por muchos años al PLD. Esto crea un escenario de negociación para Danilo que, en cierta forma, se ha comenzado a jugar desde ahora con el apoyo soterrado a ciertas candidaturas...

Adriano Miguel Tejada