La Policía Nacional y su metida de pata

La Policía no está para predicar ni adelantar planes, pues lo suyo es mantener bajo arresto el crimen y la delincuencia y no ocupar con declaraciones las primeras páginas de los periódicos.

Mucho más cuando se trata de pronunciamientos desafortunados, como los que se atribuyen al Director de la Policía Nacional sobre los hijos de madres solteras.

De que la metió, la metió, y de que no la sacó, no la sacó.

Incluso, ese es un ánimo que debe ser superado, y que se corresponde, no con un espíritu de comprensión, sino de complicidad.

¿Por qué tenía el jefe del organismo que hablar de un tema que no se tenía hasta entonces como crucial? ¿Por qué ampliar un debate –origen y naturaleza del nuevo agente– del que no tenía dominio?

Él se la buscó, y se la encontró. Ahora, no llena el cometido como policía, pero menos como disertante. No se le pide que sea todo macana, pero tampoco inefable Platón.

Antes la Guardia leía al revés, ahora endereza un poco, pero como quiera extravía los renglones. Con la asesoría de expertos, era esperable que las fallas fueran de otros.

No es que zapateros... pero tampoco el foro.

Diario Libre

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