“¡Ay, mis hermanas! ¡Asesinos, las mataron!”
Ese fue el grito desesperado y de impotencia de Dedé Mirabal al ver los cadáveres torturados de sus hermanas Patria, Minerva y Maria Teresa
Marisol Aquino
Dedé Mirabal acudió a la morgue del hospital José María Cabral y Báez, de Santiago, el mismo 25 de noviembre, día del cuádruple asesinato de sus hermanas, que querían mostrar como causa de un accidente.
El médico legista Pedro Francisco Nicasio realizó la autopsia de los cadáveres.
-“El accidente pudo provocar varias fracturas, pero... ¿cómo explica esa herida en la pierna derecha de más de 30 centímetros sin sangre?, se preguntaba el facultativo.
-“Que estaba muerta”, respondió otro médico que le acompañaba.
-“Exacto, al menos una hora muerta. Su corazón había dejado de bombear sangre, fíjese como todos los cuerpos tienen traumatismos laterales simétricos en el cuello como si hubiesen sido estranguladas.”
“Ese aspecto azuloso, moderado ocurre con estrangulamientos.
Los cuerpos fueron golpeados y heridos, lo que explica que algunas fisuras tengan sangre, luego un ahorcamiento. Probablemente debido a que estaban con vida.
-“En el cuello tiene ese color porque se sujetó violentamente hasta irse la vida y el corazón colapsa... luego, las heridas no tienen sangre y eso pasa cuando se hacen en un cuerpo sin vida”, dice el acompañante del doctor Nicasio.
-¡Señora, espere, no entre, espere!, le grita el seguridad del hospital a Dedé Mirabal.
-¡Ay, mis hermanas!, ¡Asesinos!, “¡Las mataron, asesinos!, pronuncia desesperada mientras se desploma al suelo la hermana de las víctimas que sobrevivió porque no acompañó a sus parientes en el viaje a Puerto Plata.
Así empieza el cómic titulado “El crimen de las hermanas Mirabal y Rufino de la Cruz”, una de las últimas publicaciones del Archivo General de la Nación (AGN) que se suma a su espacio editorial y en el que el lector se adentrará a diferentes ámbitos de la historia.
Por sus coloridas viñetas, “El crimen de las hermanas Mirabal y Rufino de la Cruz” atraerá a niños y adultos para que conozcan el trágico final de las heroínas Minerva, Patriay María Teresa, malogradas por esbirros de la dictadura de Rafael Leonidas Trujillo.
Los miembros del Servicio de Inteligencia Militar (SIM), que ejecutaron los crímenes, fueron sentenciados por un tribunal a 20 y 30 años de prisión, pero nunca cumplieron sus condenas porque lograron salir de la cárcel con ayuda de militares trujillistas.
La historieta cuenta los hechos reales de la lucha de las hermanas Mirabal contra la dictadura y empieza con la llegada de Dedé al hospital para saber de la condición de sus parientes.
Luego retrocede a varios años antes, exactamente a 1949, cuando a la casa de la familia Mirabal Reyes, en Ojos de Agua, Salcedo, llega la invitación a una fiesta a San Cristóbal, a la que asistiría el sátrapa Rafael Leonidas Trujillo y a la que acude Minerva, Patria y el padre de ambas. Luego la historieta continúa la cronología hasta terminar con la barbarie cometida contra las mujeres y su chofer, el 25 de noviembre de 1960.
Marisol AquinoPeriodista egresada de la Universidad Dominicana O&M, profesión que ejerce desde el 2004 en diferentes medios, especialmente impresos.
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