Abogados de gobernador neoyorquino dicen que la investigación no fue objetiva

La abogada del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, aseguró este viernes que la investigación llevada a cabo por la Fiscalía General del estado que concluyó que 11 mujeres fueron víctimas de acoso sexual por su parte no ha sido objetiva, y que se hizo para “apoyar una narración predeterminada”.

“Sé cuál es la diferencia entre montar un caso con un objetivo en mente frente a una búsqueda de hechos independiente que se lleva a cabo con una mente abierta”, dijo en una rueda de prensa la representante legal de Cuomo, Rita Glavin, antigua fiscal federal.

Durante conferencia de prensa virtual, Glavin apuntó que no han recibido copias de las transcripciones de las entrevistas de las supuestas víctimas y los testigos, y que tampoco se les dio oportunidad de responder a las acusaciones formalmente antes de hacerse público el informe el pasado martes.

“En lugar de actuar como investigadores independientes, actuaron como fiscales, jueces y jurado”, agregó la letrada, que reveló asimismo que el gobernador no recibió ningún tipo de aviso previo de que se iba a publicar el informe en el que se detallan supuestos casos de acoso sexual, algo que dijo fue “intencional”.

Pese a no contar con el material de la investigación ni con las transcripciones de las entrevistas, Glavin dijo que han podido determinar que “hay hechos que se contradicen y omisiones en ese informe, y hay que preguntarse por qué”.

Destacó, por ejemplo, que una de las exasistentes que afirman haber sufrido el acoso de Cuomo, Lindsay Boylan, dejó su puesto de trabajo porque varios de sus compañeros se habían quejado de su comportamiento poco profesional, y que incluso después de haber dimitido pidió al gobernador que interfiriera personalmente para que se le devolviera el puesto, a lo que él se negó.

“Ella estaba dando a entender al público que se fue por acoso sexual y por el mal ambiente de trabajo, pero la realidad es que se fue porque se le presentaron una serie de quejas”, explicó Glavin, que opinó que el hecho de que esa circunstancia no se haya incluido en el informe de la Fiscalía General mina la credibilidad tanto del documento como de Boylan.

También habló de uno de las acusaciones más graves que ha hecho una asistente de Cuomo, que ha presentado una querella criminal contra el gobernador por supuestamente haber manoseado un pecho en la residencia oficial el pasado mes de noviembre, según anunciaron las autoridades este viernes.

La abogada puso en duda varios detalles que dio la mujer, que ha permanecido en el anonimato, como el hecho de que ambos estuvieran solos en la oficina, o que durante el suceso el gobernador diera un portazo.

“Estaba en la (residencia oficial) ese día varias horas, y no estaba sólo con el gobernador, sino con otros compañeros”, apuntó Glavin, que destacó además que si Cuomo hubiera dado un portazo se hubiera oído, y ninguno de los testigos corroboró este detalle.

Cuestionó además el comportamiento de la supuesta víctima, que dijo estaba “bromeando, picoteando”, y que incluso ofreció quedarse más tiempo en la oficina.

La representante del gobernador señaló asimismo que el político responderá personalmente a otra de las mujeres que dice haber sido acosada por Cuomo, una de las policías que forma parte de su equipo de seguridad, que ha dado detalles sobre tocamientos inapropiados, aunque no supo dar una fecha concreta para ello.

Cuomo ha negado repetidamente las acusaciones de acosos sexual y se ha resistido a abandonar su puesto pese a la oleada de llamamientos de una larga lista de figuras políticas, entre ellas el presidente de EE.U.U, Joe Biden.

La oficina de la Fiscalía General, por su parte, respondió a las afirmaciones de la abogada de Cuomo y aseguró que “los investigadores independientes seleccionados son profesionales muy respetados”, y que las explicaciones de las 11 mujeres, que describió como “valientes”, están “corroboradas por una montaña de evidencia”.

Ahora, el que fuera uno de los políticos más populares del país por el buen trabajo que desempeñó en Nueva York durante la pandemia se enfrenta a un posible proceso de destitución por parte de la Asamblea Legislativa estatal, así como a la querella penal de la empleada que asegura que sufrió tocamientos.

EFE

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