Cuomo denuncia la división en Washington y pide bipartidismo ante la pandemia
El gobernador del estado estadounidense de Nueva York, Andrew Cuomo, acusó este miércoles al Gobierno federal de Washington y a los legisladores de ambas cámaras de propiciar un 'ambiente tóxico' para el país y recriminó a algunos senadores republicanos que denominasen como “rescates azules” las medidas que piden los estados gobernados por demócratas, ya que la respuesta a la crisis sanitaria debería tratarse como una cuestión 'bipartidista'.
Cuomo ofreció su comparecencia diaria en Washington tras reunirse en la Casa Blanca con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y pidió al Gobierno federal que 'haga su parte' en esta crisis.
'Entiendo que los estados son responsables de las reaperturas, las pruebas, los rastreos, el funcionamiento de los sistemas sanitarios, pero Washington y el Gobierno federal tienen que hacer su parte', reflexionó el dirigente demócrata, que insistió en que no puede haber una recuperación nacional si los estados y las administraciones locales no se financian correctamente.
Cuomo advirtió de que si los legisladores demócratas y republicanos fallan en su intento de dotar de mejor financiación a los estados se verían obligados a hacer recortes en los servicios esenciales como sanidad y educación en un contexto en el que probablemente se tengan que enfrentar a un nuevo rebrote del virus.
'¿Es ahora el momento? ¿Cómo ayudaría a la nación si los estados más afectados por el coronavirus representan cerca de un tercio del Producto Interno Bruto (PIB) nacional?', cuestionó Cuomo.
Asimismo, el gobernador neoyorquino recriminó su 'hipocresía' a los senadores republicanos que se muestran contrarios a mejorar la financiación estatal porque, según dijo, 'es antiamericano y feo' a la par que llamó a plantearse qué estados dan más dinero al resto y cuáles reciben menos de lo que aportan.
'La respuesta no les gustará porque Nueva York es el estado que más aporta a las arcas públicas en comparación con lo que recibe. Contribuimos con unos 29.000 millones de dólares más de los que recibimos', apuntó el gobernador neoyorquino.
“¿Y quién mete su mano más hasta el fondo?”, se preguntó Cuomo, que mostró una diapositiva que situaba a Virginia como el estado que más recibe en comparación con su contribución (82.000 millones de dólares), junto con Maryland (42.000 millones) o Kentucky (37.000 millones).
También acusó a los senadores republicanos de hipócritas tras 'empeorar' el sistema de redistribución de la riqueza entre los estados al aprobar una modificación para que estados como Nueva York o California tuviesen que aportar todavía más dinero al gobierno federal.
'Dejen de abusar de Nueva York, Nueva Jersey, Massachussets, Illinois o California, que son los estados que más han lidiado con las consecuencias del coronavirus', defendió Cuomo, que añadió que estos territorios 'no tienen culpa' de que nadie les haya avisado de que 'el virus vino desde Europa y no desde China'.
La curva continúa bajando
Con respecto al número de muertes diarias, las cifras del martes arrojaron datos similares a los del día anterior, con un total de 74 fallecimientos contabilizados el martes frente a los 73 del lunes, lo que sitúa al estado con un total de 29.302 decesos por el virus.
En este sentido, el número de nuevos casos también ha vuelto a bajar, con 181 positivos detectados durante el martes frente a los 201 del día anterior, y también han descendido las hospitalizaciones e intubaciones.
'No queremos reabrir la economía porque sí, sino para volver más fuerte que antes. Estamos ante el inicio de un nuevo capítulo que comenzó ayer con la reapertura del parqué de Wall Street', subrayó Cuomo.
Por otro lado, el dirigente prevé 'daños colaterales' para los pequeños negocios e insistió en su programa de impulso a las infraestructuras para estimular la economía como a su juicio se hizo después de la Gran Depresión de 1929.
La ciudad advierte sobre su financiación
En su rueda de prensa diaria, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, también advirtió de los problemas de financiación a los que se enfrenta la ciudad y admitió que, debido a la crisis sanitaria, el déficit de las arcas públicas de su administración había pasado de 7.400 millones de dólares a cerca de 9.000 millones.
Sin ayuda federal, aseveró de Blasio, se verían obligados a tomar decisiones 'muy dolorosas' que afectarán a la calidad de la vida en la ciudad y a la capacidad del ayuntamiento de proveer servicios básicos.
'Hemos gastado mucho tiempo, energía, corazón, alma y dinero en luchar contra el coronavirus, a menudo solos y sin ayuda del gobierno federal', se quejó de Blasio, que añadió que aún esperan noticias del presidente estadounidense o del líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell.
Estados Unidos registra hasta el momento 1.691.342 casos positivos del coronavirus SARS-CoV-2 con 99.724 fallecimientos.