Annan considera la guerra en Irak uno de los peores momentos de su mandato
NACIONES UNIDAS.- El secretario general de la ONU, Kofi Annan, consideró hoy que la guerra en Irak y el escándalo del programa humanitario "Petróleo por Alimentos" fueron los momentos más difíciles de los diez años de su mandato.
Puso énfasis en que Irak ha ofrecido "lecciones a todos", tanto los que decidieron actuar de forma unilateral como los que no apoyaron la intervención en el Consejo, pero dijo que ahora hay que "buscar maneras para estabilizar el país", y volvió sugerir la convocatoria de una conferencia internacional sobre el país árabe.
De este modo, indicó que una solución militar a la crisis con Irán por su programa nuclear sería "desastrosa", al tiempo que abogó por "un acuerdo negociada por el bien de la región y del mundo".
El escándalo del programa humanitario para Irak conocido como "Petróleo por Alimentos" también fue otra de las cuestiones más complicadas y conflictivas que tuvo que afrontar Annan durante su permanencia en el cargo.
Reconoció que hubo una "mala gestión", pero criticó la manera en "que se ha explotado la cuestión con la intención de debilitar a la organización".
"La ONU es más que el programa 'Petróleo por Alimentos'. Es una organización que aborda catástrofes como el tsunami o el terremoto de Cachemira, que lucha por la igualdad, la erradicación de la pobreza y por la dignidad", declaró.
Entre sus grandes logros, Annan mencionó los avances en el área del respeto a los derechos humanos y la aprobación del principio de la "responsabilidad de proteger", que permite la intervención exterior en un país en caso de genocidio, crímenes de guerra o de lesa humanidad.
Otro de sus logros, a su juicio, ha sido su lucha por la igualdad entre los estados miembros en el seno de la organización y la equidad dentro de los mismos países con el impulso de iniciativas para acabar con la extrema pobreza.
Resaltó sus esfuerzos para avanzar en la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, que fijaron los jefes de Estado y de Gobierno en la Cumbre de 2000, con el compromiso de cumplirlos antes de 2015.
En este sentido, agradeció la "espléndida" aportación del gobierno español, que donará 700 millones de dólares al Programa para el Desarrollo (PNUD), para financiar proyectos de desarrollo.
"Esta es la mayor contribución con este propósito nunca jamás hecha por un país y creo que es un ejemplo espléndido de solidaridad internacional que espero que sea seguido por otros estados miembros", señaló.
Otros logros que apuntó que se han conseguido durante su mandato hacen referencia a cuestiones de salud, especialmente en los programas para la prevención y tratamiento del sida y de la gripe aviar, y lo más importante, según anotó, ha sido la implicación del sector privado en estas actividades.
Resaltó también la labor de la ONU en operaciones de mantenimiento de la paz en países africanos como Sierra Leona, Liberia y la República Democrática del Congo, pero admitió que todavía existe mucho camino por recorrer.
"Hemos hecho avances en África, pero no los suficientes como para que África pueda centrarse en el desarrollo económico y social", indicó.
Annan consideró que entre todos los conflictos del mundo, el que es más urgente resolver es el de Oriente Medio, por sus amplias ramificaciones.
"Deberíamos estar preocupados por todas las crisis. Pero ya he indicado que el que tiene un mayor impacto más allá de sus fronteras es el conflicto palestino-israelí", puntualizó.
El secretario general saliente, que será reemplazado por el surcoreano Ban Ki-moon, se centró también en la crisis en Darfur, y expresó su esperanza en que el próximo año pueda haber una fuerza de paz desplegada sobre el terreno "para ofrecer una protección efectiva y seguridad a la población" de esta región del Sudán.
Puso énfasis en que Irak ha ofrecido "lecciones a todos", tanto los que decidieron actuar de forma unilateral como los que no apoyaron la intervención en el Consejo, pero dijo que ahora hay que "buscar maneras para estabilizar el país", y volvió sugerir la convocatoria de una conferencia internacional sobre el país árabe.
De este modo, indicó que una solución militar a la crisis con Irán por su programa nuclear sería "desastrosa", al tiempo que abogó por "un acuerdo negociada por el bien de la región y del mundo".
El escándalo del programa humanitario para Irak conocido como "Petróleo por Alimentos" también fue otra de las cuestiones más complicadas y conflictivas que tuvo que afrontar Annan durante su permanencia en el cargo.
Reconoció que hubo una "mala gestión", pero criticó la manera en "que se ha explotado la cuestión con la intención de debilitar a la organización".
"La ONU es más que el programa 'Petróleo por Alimentos'. Es una organización que aborda catástrofes como el tsunami o el terremoto de Cachemira, que lucha por la igualdad, la erradicación de la pobreza y por la dignidad", declaró.
Entre sus grandes logros, Annan mencionó los avances en el área del respeto a los derechos humanos y la aprobación del principio de la "responsabilidad de proteger", que permite la intervención exterior en un país en caso de genocidio, crímenes de guerra o de lesa humanidad.
Otro de sus logros, a su juicio, ha sido su lucha por la igualdad entre los estados miembros en el seno de la organización y la equidad dentro de los mismos países con el impulso de iniciativas para acabar con la extrema pobreza.
Resaltó sus esfuerzos para avanzar en la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, que fijaron los jefes de Estado y de Gobierno en la Cumbre de 2000, con el compromiso de cumplirlos antes de 2015.
En este sentido, agradeció la "espléndida" aportación del gobierno español, que donará 700 millones de dólares al Programa para el Desarrollo (PNUD), para financiar proyectos de desarrollo.
"Esta es la mayor contribución con este propósito nunca jamás hecha por un país y creo que es un ejemplo espléndido de solidaridad internacional que espero que sea seguido por otros estados miembros", señaló.
Otros logros que apuntó que se han conseguido durante su mandato hacen referencia a cuestiones de salud, especialmente en los programas para la prevención y tratamiento del sida y de la gripe aviar, y lo más importante, según anotó, ha sido la implicación del sector privado en estas actividades.
Resaltó también la labor de la ONU en operaciones de mantenimiento de la paz en países africanos como Sierra Leona, Liberia y la República Democrática del Congo, pero admitió que todavía existe mucho camino por recorrer.
"Hemos hecho avances en África, pero no los suficientes como para que África pueda centrarse en el desarrollo económico y social", indicó.
Annan consideró que entre todos los conflictos del mundo, el que es más urgente resolver es el de Oriente Medio, por sus amplias ramificaciones.
"Deberíamos estar preocupados por todas las crisis. Pero ya he indicado que el que tiene un mayor impacto más allá de sus fronteras es el conflicto palestino-israelí", puntualizó.
El secretario general saliente, que será reemplazado por el surcoreano Ban Ki-moon, se centró también en la crisis en Darfur, y expresó su esperanza en que el próximo año pueda haber una fuerza de paz desplegada sobre el terreno "para ofrecer una protección efectiva y seguridad a la población" de esta región del Sudán.
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