Esperan visita CIDH aclare distorsiones

SANTO DOMINGO. Los representantes de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), que agotan desde hoy su agenda oficial para indagar sobre las consecuencias que puede acarrear la aplicación de la sentencia sobre nacionalidad del Tribunal Constitucional, encuentran un panorama de tensión entre dominicanos y haitianos, matizada por un rompimiento del diálogo entre ambos países, el reforzamiento de la seguridad en las zonas fronterizas, y una sociedad polarizada en torno a la referida disposición.

Todavía se encuentra en el país y sin fecha de regreso, el embajador dominicano en Haití, Rubén Silié, quien fuera llamado a consulta, luego de que fracasara el diálogo iniciado entre representes de los gobiernos haitiano y dominicano, bajo la mediación de Venezuela.

Sin embargo, las expectativas de los diferentes sectores nacionales se centran ahora en que la visita de la CIDH pueda servir para aclarar "las distorsiones" surgidas.

El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, expresó ayer que recibe a la Comisión de brazos abiertos, porque en su visita se podrá aclararles "algunas series de confusiones que ellos tienen y aprensiones que creemos que no son correctas".

Interior y Policía es el estamento encargado de poner en marcha el Plan Nacional de Regularización de extranjeros en situación migratoria irregular, promulgado la semana pasada por el Poder Ejecutivo.

Fadul indicó que en el país se están dando los pasos para regularizar la migración, respetar la dignidad de las personas y los derechos de cada quien para optar por la ciudadanía o residencia, por lo que ahora los organismos internacionales podrán tener un juicio más acabado y más documentado.

"Hay muchas distorsiones sobre cómo se ha interpretado el mandato de la sentencia (TC/168-13), y creo que esas confusiones son las que han generado en algunos bloques regionales o subregionales, suspicacia, algunas declaraciones inaceptables que han hecho, porque no conocen a fondo la sentencia ni las medidas que se están tomando. Creo que el tiempo marcha a nuestro favor y se está aclarando todo con los organismos internacionales", señaló Fadul.

También el Comité de Solidaridad con las Personas Desnacionalizadas por la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional (TC), se mostró esperanzado de que la presencia de la CIDH y los informes que emitan contribuyan a solucionar lo que define como una "política de despojo de la nacionalidad".

"Esperamos que la presencia de la CIDH aliente a los diversos actores gubernamentales y políticos a la búsqueda de una solución al grave conflicto de los desnacionalizados, con la voluntad de "avanzar en todas las medidas que sean necesarias para garantizar la seguridad jurídica y el pleno goce y respeto de los derechos de los descendientes de haitianos nacidos en la República Dominicana", dice el comité en un comunicado.

Recibirá denuncias

La CIDH comenzará hoy a recibir las denuncias de alegadas violaciones a los derechos humanos, como consecuencia de la sentencia del Tribunal Constitucional, y permanecerá en el país hasta el próximo viernes. Durante estos cinco días, sus representantes agotarán un programa de reuniones, visitas y la recepción de denuncias, las cuales pautaron para hoy, mañana y el jueves en horario de 9:00 a.m. hasta las 7:00 p.m. en el Club de Profesores de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), situado en la Avenida George Washington.

A las 10:00 a.m. de hoy habrá un encuentro con las autoridades nacionales en la Cancillería, según se informó. El miércoles se trasladarán a las provincias Dajabón, Valverde, San Pedro de Macorís y La Romana, donde contemplan escuchar a los afectados.

El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, consideró que las medidas que está adoptando el gobierno para regularizar la migración en el territorio nacional debieron tomarse hace muchos años, y que las mismas contribuyen a transparentar la situación generada en torno a la sentencia del TC. Además del Plan Nacional de Regularización, que establece un proceso especial de naturalización para los nacidos en el país de padres en situación migratoria irregular. Fadul resaltó, además, la designación de Florinda Genoveva Rojas Rodríguez, como directora del Instituto Nacional de Migración.