Partido gobernante polaco firma pacto de apoyo con fuerza nacionalista
Cracovia (Polonia), 14 junio (EFE).- El nacionalista y ultraconservador Ley y Justicia (PiS), partido mayoritario de la coalición gobernante en Polonia, alcanzó este lunes un acuerdo de apoyos puntuales con la formación ultranacionalista KukizŽ15.
Los líderes del PiS y KukizŽ15, Jaroslaw Kaczynski y Pawel Kukiz, presentaron conjuntamente este pacto y recalcaron que no se trata de una coalición permanente, sino de sacar adelante con éxito varios proyectos legislativos.
El PiS se garantiza además su permanencia en el poder y su mayoría parlamentaria en caso de que los otros dos actuales socios del tripartito decidan abandonar la coalición por las crecientes diferencias entre ellos.
Kaczynski saludó el acuerdo como 'importante no sólo desde el punto de vista aritmético', sino también como beneficioso políticamente, pues 'extiende nuestro espectro social y amplía el alcance de la gente a la que podemos llegar, a la que podemos convencer'.
Por su parte, Kukiz, que saltó a la arena política tras una carrera como cantante punk y llegó a alcanzar un 19 % de los votos en las elecciones de 2015, se refirió al pacto como el principio de 'una fructífera cooperación' que permitirá 'adoptar leyes que nos permitan decir que Polonia es un estado completamente democrático, no semidemocrático'.
KukizŽ15, a cambio de los votos de sus seis escaños en todas las iniciativas del gobierno que tengan que ver con el plan económico poscovid, pedirá que se ponga en marcha su proyecto de instaurar los jueces de paz, que se saque adelante una ley anticorrupción y algunos cambios en la ley electoral que beneficien a los candidatos independientes en vez de a los partidos políticos.
KukizŽ15 se define como un 'movimiento' y no tiene el estatus legal de partido político, lo que ha llevado a su líder a criticar repetidamente la ley electoral que, según él, favorece a 'los rebaños' en vez de a los ciudadanos.
Para el PiS, el apoyo de Kukiz, que cuenta con un elevado apoyo entre el electorado joven y cuyo programa tiene puntos en común con su política conservadora, nacionalista y de tinte católico, es una garantía de que podrá mantener su mayoría parlamentaria incluso si las desavenencias con sus actuales socios de alianza llevan a una ruptura.
Desde hace tiempo, el PiS mantiene un desencuentro con sus dos socios de coalición, quienes han amenazado con dejar de apoyar al gobierno y privarle de su mayoría, lo que forzaría un adelanto de las elecciones generales previstas para 2023.
El apoyo de Kukiz ha cristalizado después de una larga serie de negociaciones que se volvieron más perentorias cuanto más creció el distanciamiento de Kaczynski con sus colegas de coalición.
La formación de Kukiz ha evolucionado desde una postura antisistema cercana a la ultraderecha hasta un programa dominado por el nacionalismo y la reivindicación de políticas sociales como eliminar el impuesto sobre la renta y defender puntos de vista católicos. EFE