Rusia acusa a EE.UU. de alentar el separatismo de los kurdos de Siria

El ejército turco y grupos de rebeldes sirios aliados lanzaron el sábado una ofensiva bautizada “Rama de Olivo” contra la región de Afrin, situada en el norte de Siria y controlada por una poderosa milicia kurda.

El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov (i), durante una reunión con su homólogo yemení, Abdulmalik al Mekhlafi (d), en Moscú (Rusia), hoy 22 de enero de 2018. (EFE/ Maxim Shipenkov)

MOSCÚ. El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, acusó hoy a Estados Unidos de alentar el separatismo de los kurdos de Siria y de intentar crear en ese país “órganos de poder alternativos”.

“Desde hace mucho Estados Unidos trata de disuadir a los kurdos con los que colabora de dialogar con Damasco. Washington ha alentado activamente y continúa alentando los ánimos separatistas entre los kurdos”, dijo Lavrov en rueda de prensa.

El jefe de la diplomacia rusa indicó que esa política de EE.UU. puede obedecer a dos razones: “o bien no entienden la situación o es una provocación consciente”.

Subrayó que los kurdos tienen un papel que cumplir en el proceso político en Siria y este debe ser garantizado sobre la base de la plataforma común de todas las fuerzas sirias que “llaman a respetar la soberanía y la integridad territorial de Siria”.

Lavrov recordó que los kurdos han sido incluidos en la lista de sirios invitados al Congreso del Diálogo Nacional Sirio, que se celebrará la próxima semana en Sochi, balneario ruso a orillas del mar Negro.

“Desde hace tiempo observamos que EE.UU. apunta a crear órganos de poder alternativos en una parte significativa del territorio sirio”, dijo.

El objetivo de la ofensiva

Las fuerzas rebeldes que apoyan la operación turca dicen ser opositoras a las YPG y a su rama política, el Partido de la Unión Democrática (PYD), calificándolos de grupos “terroristas” y “separatistas”.

“La operación busca liberar la zona de todo tipo de terrorismo y proteger a los civiles, árabes y kurdos”, afirma Yaser Abdelrahim, también jefe de Faylaq al Sham.

“No atacamos para alcanzar la ciudad de Afrin. Los edificios residenciales no son nuestro objetivo, sino únicamente las bases y posiciones militares del PYD y las YPG”, afirma.

Los rebeldes acusan también a las YPG de no combatir a las fuerzas del régimen sirio y provocar una división étnica al desplazar a la población árabe.

“El objetivo de la ofensiva es, en primer lugar, echar a los grupos separatistas de las aldeas árabes de nuestras regiones”, afirma Abu Meslem, un comandante de la coalición rebelde Jabha Shamiya.

Insiste: la operación “Rama de Olivo” no tiene por objetivo echar al conjunto de la comunidad kurda.

“Nuestro deber es echar a las facciones separatistas y hacer regresar a las familias desplazadas que han vivido en tiendas durante todo el invierno”, precisa a la AFP.

La operación

En tanto la ofensiva entra este lunes en su tercer día, los rebeldes proturcos se aseguraron el control de varias aldeas y posiciones estratégicas en las alturas de la región de Afrin.

Según la agencia de prensa oficial turca Anadolu, rebeldes sirios y tropas turcas avanzaron 5 km dentro del territorio sirio.

Turquía cubre la operación desde el aire lanzando ataques aéreos y también de artillería pesada contra los kurdos.