Centroamérica conmemora 200 años de su pacífica independencia

Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica conmemoran este año el 200 Aniversario de la Independencia de América Central de la corona española. La Capitanía general de Guatemala estaba conformada, en ese entonces, por las provincias de Guatemala, Chiapas, Comayagua, San Salvador, Nicaragua y Costa Rica, las cuales, a excepción de Chiapas (México), el 15 de septiembre de 1821, se hizo la declaración de su independencia y conformación de una junta Gubernativa provisional.

La declaración de independencia se hizo de manera pacífica, contrario a lo ocurrido en otras localidades de la región donde se produjeron enfrentamientos entre los españoles y los nativos. El ejemplo más cercano y que despertó la chispa independentista fue la Guerra de Independencia que comenzó la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando el padre Miguel Hidalgo da el llamado “Grito de Dolores” y convocó al pueblo de Dolores Hidalgo, a través del repique de las campanas de su iglesia, a levantarse en armas en contra del dominio de los españoles.

Mario de Beltranena, Mario Calderón, José Marías Delgado, Manuel Antonio de Malina, Mariano de Larrave, Antonio de Rivera, J. Antonio Larrave, Isidro del Valle y Castriciones, Mariano de Aycinena, Pedro de Arroyave, Lorenzo de Romaña, Domingo Diéguez, José Cecilia del Valle, Pedro Malina y Brigadier Gabino Gainza, son los llamados próceres de la independencia ya que fueron quienes firmaron el Acta de Independencia de Guatemala en 1821.

De acuerdo a historiadores que han abordado el tema, la chispa de la independencia, encendidas por la resistencia indígena desde la llegada de los colonizadores, comenzó a tomar forma de llamarada liberadora en el pensamiento de los nativos a inicios del siglo XIX. En 1811 y 1812 una serie de sublevaciones e insubordinaciones acontecidas en territorio nicaragüense enviaron una clara señal a la metrópoli española: esta tierra estaba decidida a ser libre.

Uno de los primeros movimientos calificados como acontecimientos previos a la independencia figura la insurrección del 5 noviembre 1811 de San Salvador debido a que las relaciones entre el intendente Antonio Gutiérrez y Ulloa con la élite criolla no eran nada cordiales, sumado a los problemas económicos, los altos impuestos y los constantes abusos provocados por el cuerpo militar. El movimiento estuvo dirigido por los sacerdotes José Matías Delgado, Nicolás Aguilar, Juan Manuel Rodríguez y Manuel José Arce, apoyados por las poblaciones de Metapán, Zacatecoluca, Usulután y Chalatenango.

En los primeros años del siglo XIX las autoridades de la Audiencia o Capitanía de Guatemala habían elevado los tributos a aborígenes y pobladores criollos, lo que tuvo como resultado una crisis política y económica sin precedentes.

José de Bustamante y Guerra, entonces capitán general de Guatemala, no aceptó los términos pactados y ordenó apresar, juzgar y castigar a los rebeldes alzados. Unas 16 personas fueron condenadas a pena de muerte pero esto no se ejecutó.

Otro acontecimiento que según historiadores marca el proceso previo a lograr la independencia fue la Conjura de Belén de 1813 en las que un grupo de hombres y mujeres, encabezado por Fray Juan de la Concepción, se reunían en secreto para planificar la libertad del pueblo de Guatemala y juraron en nombre del Evangelio no revelar el motivo de las tertulias, sin embargo, un traidor fue el responsable de que la conspiración fracasara.

Bazzara Ibarra señala que el retorno de Fernándo VII al trono de España en 1814, hizo retroceder las conquistas constitucionales pero como contrapartida intensificó y justificó la necesidad de la independencia por lo que el 24 de enero de ese año, San Salvador fue nuevamente escenario de turbulentos acontecimientos y violencia ciudadana.

“A lo largo de nuestra historia los países centroamericanos han compartido lazos profundos que han permitido que, a través de la colaboración, la cooperación y la integración regional puedan encontrar la respuesta para alcanzar conjuntamente el desarrollo de nuestros pueblos; ya que estos países tiene una historia común y una serie de potencialidades que puede aprovechar para alcanzar una verdadera región de oportunidades para el pueblo centroamericano”, refiere el Sistema de Integración Centroamericana (SICA) en una publicación sobre estos 200 años de independencia.