¿Fijar o no fijar?

Por Alejandro Fernández W.

Analista financiero

Yocasta estaba confundida e indecisa. No sabía cómo responderle a su banco que, de la nada, la contactó para ofrecerle una tasa fija en su préstamo hipotecario. Aunque tenía la bondad de ser fija hasta el vencimiento del crédito, era un poco más alta que su tasa variable actual. ¿Le convenía renegociar su contrato?

Como ella, muchos otros dominicanos están enfrentando una situación muy parecida, sea antes de firmar el contrato o ya cuando el préstamo tiene algunos años de vigencia.

Vale reconocer, antes de entrar en nuestra recomendación, que es un gran avance en las finanzas dominicanas el que exista la opción de fijar tasas de interés a largo plazo (por cinco, diez y hasta veinte años), más allá de cada tres, seis o doce meses.

Profundicemos el caso de Yocasta. Ella firmó su préstamo a veinte años en el 2011, por lo que tiene todavía catorce años por delante. La tasa original era de 11.5%, pero le aumentó antes del primer año.