Los desbancarizados

En nuestro mercado, el 64% de quienes dijeron tener una cédula tienen una cuenta bancaria, lo que nos coloca en el cuarto mejor desempeño regional.

Las prácticas financieras del dominicano son fascinantes. Muchas de ellas sorprenderían, porque reflejan un nivel de sofisticación y formalidad más profunda de las que, de entrada, pensaríamos es la realidad.

Según el “Global Findex”, un estudio comparativo que periódicamente organiza el Banco Mundial en más de cien países, el nivel de bancarización del dominicano de a pie es, de hecho, bueno.

Vemos en la primera gráfica que el 56% de los dominicanos mayores de 15 años posee una cuenta bancaria en una entidad financiera formal del país.

Contar con ese instrumento financiero básico equivale a contar con un pasaporte necesario para acceder al sistema económico formal, desde una simple oportunidad de empleo (para la que se requiere una cuenta de nómina), para recibir remesas en las mejores condiciones posibles o para contar con un préstamo bancario al 20% (anual) en vez de uno de usurero al 20% mensual (o 240% anual).

Curiosamente, aunque 56% dice poseer una cuenta bancaria, solo 32% cuenta con una tarjeta de débito para acceder a ella y apenas el 18% afirmó recibir su nómina por la vía bancaria.

En la segunda gráfica relacionamos la tenencia de una cuenta bancaria con la población que afirma tener un documento de identidad nacional o cédula, en el caso de la República Dominicana.

“La rentabilidad bancaria depende de altas comisiones bancarias (por tanto debilitando los continuos esfuerzos para aumentar la inclusión financiera) para enfrentar sus costos operativos.” Fondo Monetario InternacionalInforme del Artículo IV de la República Dominicana (2019)