Inmunidad grupal

La inmunidad de grupo depende de quienes fueron infectados y se recuperaron

Cuando Ángela Merkel habló del impacto del coronavirus sobre Alemania, sus palabras fueron calificadas como excesivamente pesimistas. Dijo que era probable que el 70% de la población terminara contrayendo la enfermedad, porcentaje éste que ningún otro líder mundial se había atrevido a mencionar.

Es posible que al hacer sus declaraciones, ella tuviera en mente lo que se conoce como inmunidad colectiva o de grupo. Ocurre cuando un alto porcentaje de la población ha desarrollado inmunidad contra un agente infeccioso, sea debido a que ha sido vacunado o porque fue previamente infectado. Esto así pues las cadenas de transmisión del virus se van debilitando a medida que éste encuentra más y más personas que le son resistentes. La probabilidad de contagio de quienes no han sido aún infectados decrece progresivamente en función de dicho porcentaje. En este caso, dado que las vacunas no van a estar disponibles por ahora, la inmunidad de grupo depende de quienes fueron infectados y se recuperaron.

Pero existen tres inconvenientes con esa inmunidad natural.

Uno de ellos es que el porcentaje de inmunes requerido es alto. Se habla de que un 60% sería necesario, alcanzable quizás antes de que termine este año. El costo de esa inmunidad sería incalculable, en términos humanos, sociales y económicos. La posibilidad menos mala sería que quienes sean infectados sean los que tienen mejores perspectivas de superar la enfermedad.

El segundo inconveniente es que no se sabe con certeza la duración de la inmunidad natural. Para que la inmunidad de grupo suceda, el período de inmunidad debe ser lo suficientemente largo como para que la transmisión se desarticule. Si es muy breve, esto podría no pasar.

Otras formas de coronavirus provocan una transitoria respuesta inmunológica, pasada la cual la persona puede ser infectada de nuevo. Y por causa de la inmunidad de grupo, se observa que algunos virus mutan y se convierten en versiones aun más letales.

Doctor en Economía de Columbia University especializado en empresas, mercados, pronósticos y riesgo.