Anadive confía en que precios de vehículos nuevos y usados se normalizará

Gremio afirma que durante el año pasado se dejaron de producir 22 millones de unidades por la falta de materiales

Falta de materias primas esenciales como los microchips y semiconductores perjudica a la industria automotriz. (Shutterstock)

Los precios de los vehículos nuevos y usados en la República Dominicana, que registran alzas desde el año pasado, debido a la crisis provocada por la pandemia de coronavirus, se estabilizarán tan pronto la producción mundial de automóviles se normalice y se incrementen las importaciones.

Así lo pronosticó Asociación Nacional de Agencias Distribuidoras de Vehículos (Anadive), entidad que respaldó la publicación de Diario Libre sobre los incrementos de precios de los vehículos nuevos y usados registrados en el mercado internacional, sobre todo en los Estados Unidos, y que se reflejan en los costos, en el ámbito local, al momento de comprar.

La Anadive, en respuesta a la citada publicación, consideró que una vez estabilizada la producción de unidades vehiculares, el mercado local volverá a su dinamismo habitual.

Un vendedor de vehículos dijo a Diario Libre que una camioneta Toyota Hilux 2022, que vendió en 56,500 dólares en agosto, se volvió a revender ahora, usada y con cinco mil kilómetros, en 58,500 dólares; 2 mil más de lo que costó nueva.

“La producción de vehículos nuevos disminuyó en los últimos dos años (2020 y 2021) como consecuencia de la pandemia, que afectó la demanda y planificación de la industria automotriz, reduciendo considerablemente la cantidad de unidades producidas y muchas marcas cerraron plantas en diferentes países, debido a falta de materias primas esenciales como los microchips y semiconductores, utilizados para los controles, sensores y partes eléctricas de los automóviles”, explicó.

El gremio reveló que la fabricación de vehículos a nivel planetario se redujo el año pasado en 22 millones de unidades, al registrar una cantidad de 76 millones de automóviles, en comparación con los 96 millones producidos en el 2019, último año con un comportamiento normal. 

“Esa drástica reducción en la oferta produjo la falta de inventarios de varios modelos y marcas, que a su vez provoca incremento de precios de las unidades nuevas existentes en el mercado y se refleja en el mercado de los autos de medio uso, que de inmediato se aprecian, con el consiguiente aumento en los precios en las subastas, donde compran los suplidores locales”, señaló.

La asociación precisó que, en el mercado estadounidense, de donde se suple el 68 % de las unidades usadas que ingresan al país, los precios, porcentualmente, han aumentado más de un 40 %, debido a las limitadas de ofertas, a la elevada inflación, provocado por la abundancia de circulante y los incrementos de los precios del petróleo y los fletes.

Indicó que “tal como hemos sostenido anteriormente, la comercialización de unidades de medio uso, posibilita a la clase media, trabajadores, jóvenes estudiantes y personas humildes poder acceder a un medio de transporte propio para mejorar su nivel de vida, con lo cual se contribuye a la cohesión e integración social, legítimas aspiraciones que no puede ser desconocida en una democracia funcional”.

Comunicó que, adicionalmente, el sector de vehículos usados genera miles de empleos directos e indirectos, ahorra divisas, crea riquezas para el país, ayuda a renovar el parque vehicular y es uno de los “grandes contribuyentes” a la sostenibilidad del Estado con el pago de aranceles, arbitrios e impuestos internos.

Licenciado en Comunicación Social, mención Periodismo por la UASD. Desde el año 2012 ha trabajado en varios medios impresos.