Cirugías plásticas, ¿qué tan riesgosas son?

Los doctores Rubén Carrasco y Luis López Tallaj explican cuáles son las intervenciones estéticas más riesgosas, a propósito de que el 15 de julio de cada año se celebra el Día Internacional de las Cirugías Plásticas

El peligro se presenta cuando el profesional no cumple con los protocolos establecidos o el paciente no está en óptimas condiciones de salud. (Shutterstock)

República Dominicana se ha consolidado como uno de los destinos más importantes del Caribe y América Latina para el turismo de salud, específicamente en el área de cirugía estética. Sin embargo, esa ‘buena fama’ se ha visto afectada en los últimos años por sonados casos de quienes, en búsqueda de la belleza, desafortunadamente encuentran desenlaces fatales.

A consideración de Rubén Carrasco, presidente de la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica (Sodocipre), las estadísticas de muerte y complicaciones por cirugías estéticas en el país son mínimas, en comparación con el número de procedimientos que se realizan por año. “Podemos afirmar que los casos que pueden presentar algún tipo de complicación son pocos, en relación al número de pacientes operados”, subraya.

Según explica, todos los expertos del área, así como los últimos trabajos científicos, concuerdan en que las causas más comunes de muerte por procedimientos de este tipo son el tromboembolismo pulmonar (TEP) y la embolia grasa. La primera, una afección en la que una o más arterias en los pulmones quedan obstruidas por un coágulo sanguíneo, mientras que la segunda consiste en la interrupción de la irrigación sanguínea ocasionada por glóbulos de grasa en un vaso sanguíneo.

De acuerdo con el cirujano, estos casos, por lo general, son respuesta del intrusismo profesional en el país, es decir, especialistas que ejercen sin ser miembros del gremio o, peor aún, que realizan este tipo de intervenciones sin contar con un aval médico. Según expresa, se trata de una problemática con la que llevan años luchando.

“Nosotros, como representantes de la Sodocipre, hemos participado en numerosas mesas técnicas con las autoridades pertinentes para colaborar con ellos en este sentido. Actualmente, incluso se están creando reglamentos para regular hasta las casas de recuperación postquirúrgicas”, refiere.

Factores de riesgo

Tras preguntarle sobre las cirugías plásticas más riesgosas, el especialista señala que estas son las liposucciones de grandes volúmenes (más de 5.5 litros de grasa) y toda intervención en la que se combinen varios procedimientos a la vez. Esto, explica, debido al tiempo de operación bajo anestesia y a las posibles pérdidas sanguíneas, así como los propios cambios corporales al remover grandes cantidades de grasa.

En ese sentido, el también cirujano plástico Luis López Tallaj dice que el peligro se presenta cuando el profesional no cumple con los protocolos establecidos o el paciente no está en óptimas condiciones de salud. “Hay riesgo cuando el paciente es una persona obesa a la que le quieren vender esbeltez en un combo, en la que el paciente tiene una hemoglobina Borderline, vamos a decir casi anemia para los procedimientos que se quiere realizar”, explica, agregando que si el paciente está en sobrepeso, lo ideal es contraindicar el procedimiento para contorno corporal.

El poco tiempo de recuperación es otro factor que influye en la complicación de una intervención de este tipo. “Un paciente que viene al país por menos tiempo del requerido para su recuperación, y a condiciones precarias de mayordomía, siguiendo el procedimiento en el hogar, son los que establecen las complicaciones pequeñas o grandes, las cuales serán reseñadas por la prensa en titulares”, enfatiza.

¿Qué garantiza el éxito de una cirugía plástica?

Aunque el éxito de una cirugía de cualquier tipo nunca puede garantizarse al 100 %, hay algunas medidas generales que ayudan a disminuir las probabilidades de complicaciones. En primer lugar, Carrasco cita la selección adecuada del profesional (cirujanos certificados y acreditados). A eso agrega un peso corporal dentro de rangos aceptables, niveles adecuados de hemoglobina (nivel sanguíneo), control absoluto de condiciones médicas, tales como el asma, la diabetes y la hipertensión.

Ambos especialistas concuerdan en evitar, dentro de lo posible, someterse a procedimientos múltiples. “No se debe someter a un paciente a una cirugía que supere cinco horas en quirófano”, externa López Tallaj. Añade que realizarse las analíticas de lugar es vital, dado que estas son las que establecen que el paciente goza de un buen estado de salud física y que su riesgo es mínimo a la hora de realizarse el procedimiento deseado.

“Estos estudios, la evaluación del cardiólogo y del anestesiólogo antes del día de la cirugía son las que determinan el riesgo que correrá el paciente a la hora de realizarlo, son las evaluaciones que descartan o autorizan el ser sometido al mismo”, concluye.

Periodista de Revista. Me apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.