Anya Taylor-Joy se abre las puertas de la moda y triunfa con el tablero

Tras recibir una inmensa cosecha de alabanzas por su papel protagonista en la serie “Queen’s Gambit”, la actriz se meterá en la piel de Furiosa, la heroína del filme “Mad Max”

Anya Taylor-Joy. (Efe)

La protagonista de uno de las últimos éxitos de Netflix tiene apellido inglés, pero habla español con acento argentino. Anya Taylor-Joy, que pasó parte de su infancia en Buenos Aires, da vida a Beth Harmon, una niña y joven prodigio del ajedrez, en “Queen’s Gambit”, basada en la novela de Walter Tevis.

Taylor-Joy nació en Miami hace 26 años, pero al poco tiempo se trasladó a Argentina, con sus padres, que aunaban ascendencia inglesa, española, escocesa y argentina, y sus cinco hermanos.

“Tengo la suerte de venir de una gran familia”, dijo la actriz a Irish Times en 2017. Ella es la pequeña, se lleva siete años con la que la precedió y con la mayor existe una diferencia de más de dos décadas. “Pero luego, debido a la diferencia de edad, me criaron como a una hija única. Así que tuve lo mejor de ambos mundos”, añadió.

Tras seis años en el país latinoamericano, la familia se mudó a Londres, Reino Unido. “Me sentía muy sola cuando llegamos aquí”, dijo al medio irlandés. Al principio, se mostró reacia a aprender el idioma: “Pensé que si me negaba a aprender inglés mis padres tendrían que llevarme a casa en Argentina”.

Aunque le abrieron las puertas de la moda siendo adolescente, su hueco estaba en la interpretación, no sin tener que renunciar a algunas cosas por el camino para llegar a él.

En 2015, la actriz de ojos grandes y almendrados se metió en la piel de Thomasin, en la cinta “The Witch”. Tenía 19 años y su nombre comenzaba a oírse en la meca del cine, aunque la fama parecía ser secundario para ella. "Yo no quería ser famosa, yo quería ser artista”, dijo en 2017.

Un año más tarde protagonizó “Morgan”, un thriller con tintes de ciencia ficción. También dio vida a una amiga de Barack Obama en “Barry”, dirigida por Vikram Gandhi.

La tendencia en el género de terror continuó al año siguiente, 2017, con su participación en “Split”, de M. Night Shyamalan. En este caso, interpretaba a una chica secuestrada por un hombre con trastorno de identidad disociativo. Un personaje al que volvió a dar vida en “Glass”, en 2019.

Personajes oscuros

En 2018, en una entrevista en The Guardian le preguntaron si se sentía atraída por la ficción que giraba en torno a la oscuridad. Ella dijo que no era algo que tuviese planeado y que estaba conectada con sus personajes y que ellos vivían en mundos oscuros.

“Me encantan los cuentos de hadas, los de Hans Christian Andersen. Creo que hay mucha humanidad en la oscuridad y el dolor”, dijo la actriz.

“En términos de trabajar en películas, es muy divertido interpretar cosas oscuras porque puedes sentir el alcance de tus emociones y tu rango de lo que es aceptable es mucho más amplio en ese tipo de películas”, añadió.

Entre otros títulos que figuran en su currículum están las cintas “Thoroughbreds”, de 2017, “Marrowbone”, del mismo año y series como, “Peaky Blinders” o “The Miniaturist”.

En 2020, ha alcanzado de nuevo el reconocimiento por su trabajo, por parte de crítica y público, gracias a su papel de Beth Harmon en la serie de Netflix, “Queen’s Gambit”.

Aunque pertenecen a géneros distintos, hay un hilo que ha unido sus personajes en películas como el de “The Witch”, con otros como el de “Queen’s Gambit”, “Emma” o “Furiosa”: son mujeres que se salen de los roles los que Hollywood ha encasillado a los personajes femeninos hasta hace poco.

“Cada vez que he recibido un papel de novia, lo he devuelto como ¿eh?, ¿por qué?”, dijo a The Guardian en 2018. “Estoy emocionada por esta era de mujeres en la que estamos entrando en este momento, donde la gente entiende que todos somos personas y que se tiene más debajo de la superficie de lo que uno pueda pensar al principio”.

Con motivo de la presentación de “Split”, la cinta de M. Night Shyamalan en la que encarna a una mujer secuestrada por un hombre, relató a Bustle cómo estuvo atenta de que no se cayese en la explotación en cuanto a las mujeres se refiere.

“La cámara estaba un poco encima de mí y aparté a Night y dije: ¿Estamos haciendo una película misógina? Tienes que decírmelo ahora mismo”, contó Taylor-Joy sobre un momento del rodaje”.

Cuando vi la película, me di cuenta de que ese no era el caso”, concluyó y ahora, parece que ha llegado su gran momento y reconocimiento. Una actriz de muy largo recorrido.

Por Manuel Noriega.

EEF/REPORTAJES

Fehaciente, fidedigno y fácil. Agencia de noticias multimedia en español.