Monotonía espacial, en jaque con las piezas de diseño

Un objeto de diseño puede ser el punto de partida hacia un espacio con estilo y personalidad...

Este patín “Roller Stop”, de Harry Allen, se utiliza para apilar libros, sostener puertas o como pieza decorativa (De Posh+Design).

La invariabilidad Estos objetos son motivo de conversación en los espacios donde se ponen presentes, y permiten que expresemos a plenitud nuestros gustos, deseos y necesidades.

Los curiosos artículos también son capaces de ser implementados dentro de los estilos decorativos existentes. Hay diseñadores que se inclinan por la tendencia minimalista, mientras que otros prefieren mezclar o crear piezas reciclando distintos elementos.

Y es que la espontaneidad, intuición, fantasía, juegos, personas, comida, viajes, dibujos, animales, lenguaje, amor y, sobre todo, el humor son la fuente de inspiración para la materialización de estos productos.

Simples detalles, como candelabros, piezas de centro, bases, lámparas, relojes… Son ornamentos que aparentan ser normales y convencionales, hasta que se presentan con un concepto de diseño bien marcado -y menos predecible-.

Hacer uso de estas piezas es sinónimo del buen diseño. Muchas veces, estos objetos son creados por grandes diseñadores; otras, por nuevos talentos que hacen uso de los últimos materiales y conceptos de diseño alrededor del mundo.