Fertilidad y celiaquía: ¿cuál es su relación?

Se conoce por celiaquía a un trastorno causado por la intolerancia al glúten. Ante la ingesta de alimentos que contengan glúten tales como cebada, trigo y centeno, el sistema inmunitario de la persona celíaca, responde para protegerse. Con el tiempo, si la dieta no se modifica, esta afección autoinmune daña el revestimiento de los intestinos.

La malabsorción y malnutrición del organismo asociadas a la enfermedad celíaca, suelen afectar la secreción de las hormonas implicadas en la regulación de la reproducción o la ovulación. Por esta razón, los médicos siempre sugieren a quienes desean quedar embarazadas que se realicen los exámenes para detectar esta patología.

Si una mujer padece de celiaquía, comenzará a tener cambios y problemas relacionados con lo ginecológico desde la adolescencia. Esto puede producirse por medio de menarcas tardías, amenorreas, menorragia o ciclos irregulares. A su vez, en la adultez puede aparecer una menopausia precoz y Síndrome de Ovario Poliquístico.

Por otro lado, durante el embarazo el bebé también puede sufrir consecuencias debido a esta enfermedad. Esto se debe a que una dieta sin glúten puede repercutir en un correcto desarrollo y suelen existir carencias de nutrientes, minerales y vitaminas.