Conspirando...

El video filtrado de la sesión de la Junta con los delegados de los partidos en la mañana de las elecciones fallidas deja una gran lección.

Los mismos partidos que piden en público la renuncia de la Junta o convocan a vigilias o a tomar las calles, son prudentes cuando creen que “el pueblo” no los ve. Todos apoyaron unánimemente la decisión de suspender la jornada y mostraron apoyo a la Junta. A pesar el disgusto de los acontecimientos.

Después... cambiaron el tono. Eso se llama populismo.

Tres teorías de la conspiración son las que más seguidores reúnen:

El sabotaje es obra del PLD, que no quería ver que el mapa de los gobiernos municipales ya no era morado. Esta derrota arrastraría sus opciones de mantenerse en el poder en las elecciones de mayo. No lo iban a permitir.

No, dicen otros. El sabotaje es cosa de la Fuerza del Pueblo, aferrado a su teoría de fraude en las primarias peledeístas y de la incompetencia de la Junta.

Para nada, contesta un tercero. Todo esto ha sido organizado por el PRM, que es el más beneficiado. Hundiendo al PLD se garantiza el triunfo en mayo.

Todas estas teorías conspirativas evidencian la convicción de los votantes de que un fraude electoral puede ser ideado por cualquier partido. Que la huella de la política asistencialista que les ha permitido gobernar a unos y otros es profunda pero no da más de sí. Que la regeneración que necesita la democracia dominicana pasa por cambiar estructuralmente el funcionamiento de los partidos porque de seguir así... terminaremos mal. Que estamos ante un torneo electoral de pésimos perdedores.

(Pero el 15 de marzo tiene que salir bien.)

Inés Aizpún es una periodista dominicana y española. Ha recibido el premio Caonabo de Oro, el Premio de la Fundación Corripio de Comunicación por su trayectoria, y el premio Teobaldo de la Asociación de Periodistas de Navarra.